A menos de un mes para asumir la presidencia, Alberto Fernández reveló que "se está avanzando mucho" en las negociaciones sobre el pago de la deuda argentina y apuntó a que se debe permitir el crecimiento del país para poder cumplir con los plazos.
"No hay ninguna posibilidad de pagar si la Argentina no puede pagar. Si en la Argentina del final de Macri sólo se pueden comprar en ventanilla 100 dólares al mes está diciendo que no hay más dólares", aseguró Fernández en decalaraciones a El fin de la metáfora, que se emite por Radio 10.
Y enfatizó: "La Argentina no imprime dólares, imprime pesos y los dólares necesita conseguirlos exportando. Todavía, Argentina está lejos de alcanzar los términos de exportación que necesita para recuperar sus reservas".
"Se está avanzando mucho. Tampoco hay que salir corriendo porque es una negociación, y cuando negociás trazás una estrategia para buscar las mejores oportunidades para hacer las cosas. Es una negociación compleja", indicó.
Y enfatizó: "No necesito dinero prestado ni del Fondo ni de nadie, necesito crecer"
En ese sentido, el presidente electo señaló que en las negociaciones se reclamó que "no nos exijan pagar a costa de los que menos tienen", y remarcó que "el ajuste ya no hay dónde hacerlo". "Nosotros lo entendemos y siento que los acreedores también", agregó.
Además, subrayó que se está "avanzando más rápido que lo que los medios creen" y reveló que está "tranquilo".
"No quiere decir que lo tenemos resuelto, pero estoy tranquilo como para encarar el proceso de negociación y encarar un proceso que le sirva a la Argentina", afirmó.
En cuanto al golpe de Estado en Bolivia, Fernández dijo: "He pedido que la ONU se involucre. Lo que está pasado en Bolivia es de una gravedad inusual y lo de la OEA es de una gravedad doble. El descaro de Almagro no tiene nombre, su temor es que se conozca la verdad de la situación".
"Lo que hizo la OEA fue preciptar el informe para que se conozca el día domingo que fue el día que todo ocurrió. Pensé que podían ser más cuidadosos con la formas. En Bolivia las cosas están muy mal, han usurpado el poder lisa y llanamente", consideró.