El presidente de la Nación, Alberto Fernández, recibió al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, dos días antes del debate de la ley impositiva 2020 que tratarán los Diputados de la provincia luego del traspié en el Senado a fines de 2019. De este modo, el encuentro funcionó como un fuerte respaldo al mandatario bonaerense.
La ley impositiva, que funcionará como complemento de las emergencias declaradas por la Legislatura y permitirá diagramar el Presupuesto de este año, fue uno de los temas centrales pero no el único. Según pudo saber El Destape, también se abordaron la lucha contra el hambre y el bono a estatales entre otros ítem.
Se trató de un encuentro más en medio de continuas charlas entre ambos mandatarios, con varios temas de trabajo en común. El debate que comenzará el miércoles en diputados fue central. Con la sanción de la normativa, Kicillof podrá saber en qué punto de partida se encuentra la provincia, diagramar el Presupuesto, proyectar el pago de los vencimientos de deuda, lograr un aumento considerable para estatales y docentes, además de la coparticipación municipal, tema que le importa en demasía a los intendentes de todos los partidos.
El Gobierno bonarense abrió la negociación del proyecto de ley y cambiará algunas de las pautas establecidas en el proyecto original ante los reclamos de la oposición. Así, están dispuestos a modificar el aumento fijado al impuesto a los Ingresos Brutos en la fabricación de medicamentos y la tasa extraordinaria establecida a algunas actividades portuarias. Sin embargo, buscarán mantener la suba tope del 75% para el inmobiliario urbano y rural que afectará sólo a grandes contribuyentes.
No casualmente, Fernández también se reunió con el intendente cambiemita de Lanús, Néstor Grindetti, uno de los que se mostró favorable a debatir el proyecto del Ejecutivo provincial. En declaraciones a El Destape Radio, el mandatario comunal aseguró que "ninguna de las dos partes se tiene que poner dogmática" sino tratar "de encontrar un punto de encuentro", y "sentarse con papel y lápiz con los equipos técnicos" para "encontrarle una vuelta" a la normativa.
Según Grindetti, el objetivo es tener "un punto de encuentro" y remarcó que comparte el punto de vista del gobernador de lograr la "progresividad en el sistema" impositivo. Sin embargo, cuestionó lo que el oficialismo quiere mantener: "Nos parece que el porcentaje del 75% es realmente excesivo y la cantidad de vecinos afectados por eso están lejos de ser ricos".
La semana pasada, luego del traspié en el senado, Kicillof se reunió con los intendentes comunales opositores a quienes les expresó la necesidad de convencer a sus diputados para avanzar con el debate. Este encuentro fue el que destrabó la negociación por la ley que la Cámara alta trabó.
Después de la pared del senado, el Gobernador lanzó: “Si los que mas tienen, los multimillonarios ¿no pueden hacer un esfuercito más? Todo lo que se recaude, debería parar al que está ahora ahorcado. No son las políticas de derecha ni de Macri y Vidal". Apelando al diálogo expresó: “No quiero romper nada ni generar situaciones de que yo estoy incentivando, lo que pido es que tengan un comportamiento sensato”.
Pero Kicillof y Fernández también charlaron sobre el plan de lucha contra el hambre, la definición de un aumento remunerativo para estatales (como se decretó el viernes con los privados) y las alternativas que estudia la provincia para poder hacerle frente.