El presidente Alberto Fernández pidió este domingo "no relajarse" con el cumplimiento de la cuarentena obligatoria y advirtió que "el problema está muy lejos de terminarse".
"Yo me siento muy acompañado, siento que la sociedad nos está acompañado claramente. Ha entendido que estamos viviendo una situación de emergencia y una situación dramática. A partir de eso todos necesitamos unir esfuerzos", destacó el mandatario.
En una entrevista con el diario La Voz, el funcionario celebró el "muy alto" nivel de acatamiento de la medida decretada el 20 de marzo pasado, y que ya lleva un mes de vigencia.
A su vez, Fernández señaló que se siente "muy acompañado" por la dirigencia política opositora, y resaltó el hecho de que ante una crisis se encuentren todos "tirando para el mismo lado".
El jefe de Estado insistió en que el eje central de la respuesta del Estado tiene que ver con la gestión de la atención sanitaria para "salvar vidas", y en un segundo lugar ver de qué forma se pueden mitigar los efectos económicos de la crisis.
"Tenemos cálculos de deterioro de la economía y sabemos cuál es el deterioro mensual en nuestro PBI que la cuarentena genera, pero ahora no tenemos que ocuparnos de eso. Tenemos que ocuparnos de eso y ver cómo seguimos con la cuarentena y poner en marcha algunas actividades y que el costo fiscal no se convierta en un problema de futuro", subrayó.
En otro orden, el presidente respaldó la idea de Cristina Kirchner y de Sergio Massa de retomar las sesiones del Congreso de manera virtual, y puso reparos a la propuesta opositora para que se realicen de manera presencial.
"Lo que más quisiera es que el Congreso sesione, porque necesito medidas que sólo el Congreso puede dictar. Yo tengo limitaciones con los DNU y hay cosas que el Congreso necesita dictar y necesito que se reúna", sostuvo, y puso como ejemplo el impuesto a las grandes fortunas que impulsa el kirchnerismo, iniciativa que cuenta con su apoyo.