Alberto Fernández asumirá el 10 de diciembre como presidente de todos los argentinos. Tras ratificar su triunfo sobre Mauricio Macri en el escrutinio definitivo, quien lidera la fórmula del victorioso Frente de Todos tendrá que afrontar diferentes problemas que dejará el gabinete saliente. Los mismos, claro está, tendrán como prioridad socorrer a los sectores de la sociedad más golpeados por la política de ajuste impulsada por Cambiemos desde 2015 hasta la fecha.
A diferencia de Macri, con quien se hablaba sobre aspectos del fútbol nacional inclusive antes de ganar el balotaje frente a Daniel Scioli, Fernández sabe que las urgencias apuntan hacia otro lado. De hecho, antes de las PASO celebradas en agosto pasado, Alberto fue claro al momento de ser consultado sobre una posible vuelta de "Fútbol para Todos" y de la actual televisación codificada.
"Quisiera que los dirigentes del fútbol alguna vez se pongan de acuerdo y si hay algo que cambiar que lo cambien, pero esto de que el Estado vaya en socorro del fútbol, no. El Estado tiene que ir en socorro de los pobres, no del fútbol", sentenció el presidente electo, y agregó: "La Argentina tiene millones de problemas importantes antes que el fútbol. No aparece en los primeros mil lugares de las prioridades de mi agenda".
De todos modos, Fernández (reconocido hincha de Argentinos Juniors y seguidor fiel del deporte más icónico a nivel nacional) no descuidará la importancia que este ámbito tiene para el país que presidirá hasta el año 2023. De hecho, si de materia deportiva se trata, Alberto ya se encuentra trabajando en pos de conformar la secretaría de Deportes que lo acompañará al momento de asumir: Facundo Moyano y Matías Lammens son quienes pican en punta para ser los titulares de la misma.