En uno de los anuncios más esperados, el proyecto de ley de emergencia económica propondrá suspender la fórmula de movilidad de las jubilaciones, pensiones y prestaciones sociales por seis meses, para elaborar un nuevo cálculo. Además, autorizará al Poder Ejecutivo a otorgar los aumentos a esos sectores, que abarcan a 18 millones de personas.
A fin de año habrá un bono de suma fija por $ 2.000 por única vez para los beneficiarios de la AUH. Así lo consignó el presidente Alberto Fernández, en una entrevista a Telefé. Además, aquellos que cobren la jubilación mínima recibirán un bono extra de $ 5.000 en diciembre y en enero. Al mismo tiempo, quienes ocupen la franja de ese tipo de haber recibirán medicamentos gratis.
Con las facultades que otorgaría el Congreso, el Gobierno dispondría aumentos por decreto durante 2020 para la Asignación Universal por Hijo, en las asignaciones familiares y subas en las jubilaciones y pensiones, diferenciadas por rango de haberes, con incrementos mayores para los que ganan la mínima. Sin embargo, los beneficiarios con mayores ingresos quedarían excluídos.
El proyecto de ley también suspende la mayor reducción de las contribuciones patronales con destino a la Seguridad Social que debe entrar en vigencia a partir del 1° de enero.
Con la actual fórmula de movilidad, el aumento de marzo vendría con una suba del 11,56% y en junio debería aplicarse otro incremento según la inflación y la evolución de los salarios formales del cuarto trimestre de 2019, que se estima podría rondar el 15%.
Por ende, los aumentos que se apliquen durante los 180 días que fija la ley deberían superar esos valores y además recuperar parte de la pérdida del 20% que sufrieron los jubilados y demás sectores sociales durante la vigencia de la fórmula anterior.