Al grito de "los golpistas no pasarán", miles de ecuatorianos se congregaron este jueves frente al palacio del gobierno, para defender la Revolución Ciudadana frente a protestas de la oposición. Desde el balcón presidencial, el mandatario Rafael Correa denunció que las autoridades locales opositoras Mauricio Rodas (Quito), Jaime Nebot (Guayaquil) y Paúl Carrasco (Azuay) planean un gran marcha en Quito y les advirtió: "Aquí nos encontrarán en paz, pero firmes".
"Aquí nos encontrarán defendiendo nuestra revolución", declaró el presidente al denunciar que Rodas y Nebot, alcaldes de las dos mayores ciudades del país, y Carrasco, prefecto del Azuay (sur andino), están reunidas para diseñar los próximos pasos de la oposición. Además lamentó que busquen "convulsionar al país" a pocos días de la llegada del papa Francisco al Ecuador.
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"Van a planificar en las próximas semanas una gran marcha aquí en Quito (...) no nos vamos a quedar con los brazos cruzados", anticipó Correa y añadió: "Aquí nos encontrarán en paz, pero firmes; repletos de alegría, pero también de determinación. No jueguen con la paciencia de nuestra gente, callada, sencilla, paciente, pero presente y dispuesta a proteger lo logrado en estos ochos años de historia, de ilusión, de leyenda", afirmó el mandatario entre aplausos.