El paro anunciado por la Confederación General del Trabajo (CGT) que conduce Hugo Moyano repercutirá en escuelas, puertos, transportes y servicios públicos en Capital Federal y varias provincias del país.
En escuelas públicas y privadas bonaerenses y porteñas y del resto del país abrirán sus puertas para permitir la asistencia a clase mientras se sumarán a la medida los sindicatos disidentes de Ctera con conducciones de izquierda.
En el ámbito universitario, profesores de Conadu Histórica y las 29 regionales de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) también se sumarán a la huelga. Cuatro de las cinco federaciones docentes de la paritaria nacional -Ctera, UDA, CEA y Sadop- confirmaron que no cumplirán la huelga, mientras los técnicos de Amet decidieron despegarse de sus anteriores aliados y se sumarán al paro.
Mirta Petrocini, titular de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), aclaró que "acompaña el paro nacional al ser parte de la DAC", la agremiación Docentes Argentinos Confederados, y apuntó que el impuesto a Ganancias "es regresivo y perjudicial para el trabajadores".
La huelga nacional paralizará actividades de los puertos del Gran Rosario, dejará sin transporte a todo el país y afectará los servicios públicos y de educación en las provincias por la adhesión de gremios a la protesta.
Se esperan movilizaciones de médicos en Catamarca, de docentes en Santiago del Estero, de la CTA en Córdoba, Tucumán y Tierra del Fuego, y piquetes que cortarán el tránsito en Rosario por parte de la Corriente Clasista y Combativa.