"El Tano", el libro que destapa a Daniel Angelici, protector de Macri en la Justicia

20 de octubre, 2016 | 16.26
"No sé qué significa ser operador. No conozco el edificio de Comodoro Py", aseguró Daniel Angelicien el programa de Mirtha Legrand. Importante empresario del sector del juego, presidente de Boca Juniors, vicepresidente del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal y amigo e integrante de la mesa chica del presidente Mauricio Macri hacen de Angelici algo más que "un operador en las sombras".

Angelici y Macri se conocieron en 2003, cuando en la segunda vuelta de la elección de ese año Macri enfrenta a Ibarra y "El Tano" le ofrece la estructura de la Unión Cívica Radical para fiscalizar. Angelici fue el encargado de tender puentes entre el PRO y una fracción del radicalismo que terminaría constituyendo PROA; integrada por varios integrantes del entorno del binguero que hoy están en lugares clave del Gobierno.

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Desde que comenzó a gobernar Macri en la Ciudad, en 2007, Angelici proveyó protección judicial al líder del PRO a través de sus nexos con distintos actores del arco político, independientemente del signo partidario. Un ejemplo de esto se da con lo que ocurrió con el juez en lo Contencioso Administrativo, Roberto Gallardo, que complicaba a la gestión con presentación de amparos.

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A través de una reforma electoral le licuaron ese fuero creando 10 juzgados. Esto lo logró negociando con Sebastián De Stefano, su hombre de confianza, y con Juan Manuel Olmos, que en ese momento era el referente del kirchnerismo dentro del Consejo de la Magistratura. Además, Angelici le sugirió a Macri promover un ascenso de Gallardo como defensor general adjunto en materia Penal, Contravencional y de Faltas, cargo que ejerció desde el 17 de octubre de 2011 hasta el 31 de marzo de 2013.

Esta maniobra, considerada la primera de Angelici en el ámbito de la Justicia en favor de Macri, es explicada con más detalles en "El Tano", la biografía no autorizada de Angelici que escribieron de Ignacio Damiani y Julián Maradeo, donde quedan al descubierto los enigmas y las versiones que se tejen respecto de quien no sólo se jacta de ser amigo íntimo de Macri sino de quien logró transformarse en miembro de su núcleo selecto, tanto a nivel empresarial como político y hasta deportivo.

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Tras ser electo presidente, Macri le ofreció la Agencia Federal de Inteligencia a Angelici en dos oportunidades y éste la rechazó. Pero sugirió el nombre de Gustavo Arribas, ex escribano de Sociedad Macri (Socma) y realizó varios negocios con futbolistas en la época que Macri era presidente de Boca. El más conocido fue el pase de Tevez al Corinthians, de Brasil, denunciado por evasión fiscal y lavado de dinero.

Asimismo, "El Tano" ubicó a quien fuera su operador en el Consejo de la Magistratura porteño, Sebastián De Stéfano, en la Secretaría de asuntos jurídicos, que es el enlace con el fuero federal, y Juan José Gallea como director de finanzas de los servicios. A ellos se les suma Darío Richarte quien, además de ser vicepresidente de Boca, amigo íntimo y hombre suplente de Angelici en la AFA, es desde la AFI el contacto de El Tano con la justicia federal.

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En el libro se detalla el estrecho vínculo de Angelici con el ministro de Justicia porteño, Martín Ocampo, quien fue socio de uno de sus bingos y es el padrino de su hijo. "Daniel Angelici es como un hermano", confesó Ocampo en diálogo con el programa El Hecho Maldito (FutuRöck). En Buenos Aires, también tiene relación con el presidente del Consejo de la Magistratura, Enzo Pagani, director de Boca Social junto a María Inés Belloni, esposa de Angelici.

En "El Tano" se explican todos estos vínculos, y muchos más, que demuestran que Angelici es un experto en colocar personas de confianza en distintos terrenos explican su progresivo ascenso desde los 80 a la actualidad. "Angelici pretende que se haga foco en su condición de presidente de Boca y minimiza su poder, pero es el brazo ejecutor de las políticas de Macri en la AFA, en la Justicia y en Boca", señaló Damiani a El Destape.

Cerca de declarar en una causa por tráfico de influencias

En marzo pasado, Elisa Carrió señaló a Angelici como el responsable de pedirle al ahora ex juez federal Norberto Oyarbide que se jubilara y lo acusó de ser "uno más en la larga tragedia nacional de operadores y vínculos promiscuos entre operadores políticos, la Justicia, los servicios de Inteligencia y los clubes de fútbol".

"Venían señores que me decían ´nosotros tenemos varios juicios políticos en contra de su persona en el Consejo de la Magistratura y los estamos analizando´. Era una sutil, espléndida y descarada extorsión", indicó Oyarbide en declaraciones al diario La Nación.

Actualmente hay una causa judicial en curso en la que se investiga el presunto tráfico de influencias por parte de Angelici, en nombre de un tercero, para que Oyarbide se jubile y no se exponga a un eventual juicio político.

El fiscal Federico Delgado detectó que el 4 de diciembre del 2015 salió una llamada del teléfono de Claudio Blanco, pareja de Oyarbide, hacia el de Fernando Pontoriero, empleado de Angelici en World Games SA, y que otra llamada en dirección contraria se produjo el 12 de diciembre. En ambos casos los teléfonos se encontraban en zonas cercanas a Comodoro Py.

Por este tema, la semana pasada Oyarbide declaró ante el juez Sebastián Casanello. Allí, negó conocer a Angelici y afirmó que no posee celular, que su número particular no figura en guía. Ahora, Casanello deberá resolver si cita o no a Angelici a declarar.

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