Hay cortocircuitos en Cambiemos. El radicalismo publicó un comunicado para respaldar al secretario de Salud, Adolfo Rubinstein, luego de que trascienda la posibilidad de que el presidente Mauricio Macri dé marcha atrás con la resolución ministerial que actualiza el protocolo de aborto no punible.
A través de un comunicado, el bloque de la Unión Cívica Radical salió a expresar la “profunda preocupación acerca de lo sucedido respecto a la resolución 3158/2019 del ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación publicada el día de hoy en el Boletín Oficial que referida al protocolo para la atención integral de las personas con derecho a la interrupción legal del embarazo (actualización 2019)”.
Al respecto, advirtieron que “dicho protocolo busca garantizar la interrupción del embarazo en los casos previstos por el Código Penal que impliquen riesgo en la vida o salud de la mujer o en casos de violación” y cuestionaron que “horas después de la publicación de dicha resolución surgieron cuestionamientos que dan cuenta de la intención de revocar la resolución mencionada”.
El bloque radical manifestó su rotundo respaldo “solidaridad y acompañamiento” con Rubinstein al indicar que “a través de su decisión no ha hecho más que garantizar la aplicación de un derecho consagrado por la legislación nacional vigente mediante un instrumento que ya se encuentra vigente desde el año 2007”
“Reafirmamos nuestro compromiso para garantizar la plena aplicación del protocolo vigente y solicitamos al Presidente que sostenga la resolución mencionada previamente, entendiendo que estas acciones deben enmarcarse en una política pública con perspectiva federal de aplicación articulada en todo territorial nacional”, sentencia el final del comunicado.
A penas se dio a conocer la noticia de que la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, daría marcha atrás con la actualización del protocolo por orden de Macri, los legisladores radicales cuestionaron duramente al gobierno saliente.
La relación dentro de Cambiemos está en su peor momento. Anteriormente, el radicalismo salió a repudiar el golpe de Estado en Bolivia y cuestionó la pasividad con la que se manejó el Ejecutivo nacional.