El Intendente Fernando Espinoza recibió en el Palacio Municipal de La Matanza al CEO de ACINDAR, Marcelo Marino, y al gerente de Relaciones Institucionales, Facundo Velasco, en un encuentro del cual también participó la Secretaria de Producción del distrito, Débora Giorgi. La empresa fue autorizada a principios de mes a reabrir sus puertas y, ahora, a ampliar la producción y el personal involucrado.
“Frente a situaciones como éstas, cuando una fábrica de la vital importancia de ACINDAR viene a plantear que ya ha adecuado sus protocolos para sumar más trabajadores y producir más de lo que ya viene haciendo en plena pandemia, es cuando sentimos el orgullo de ser argentinos, de ser bonaerenses y de ser matanceros”, destacó Fernando Espinoza tras la reunión.
Para el intendente, "este acuerdo demuestra que no hemos suspendido el presente, sino que estamos cuidando la vida de las argentinas y los argentinos para la Argentina del futuro que ya estamos construyendo en medio de la peor crisis que ha sufrido la humanidad entera desde mediados del siglo pasado”.
ACINDAR elabora 1,75 millones de toneladas de acero en sus plantas de La Matanza y San Nicolás (PBA), Villa Constitución y Rosario (Santa Fe), y Villa Mercedes (San Luis). En conjunto, emplea a 2.300 personas, de las cuales 325 están en La Tablada, que es la sede corporativa de la empresa.
La empresa siderúrgica solicitó aumentar el personal a disposición para trabajar de manera presencial en la fábrica de La Matanza, a fin de atender la mayor demanda de clientes de diversos sectores del mercado interno y externo para los sectores de la construcción, petróleo, energía, automotriz, agro e industria en general. En el encuentro, se le planteó a la compañía que aún con este aumento de dotación debe trabajar con el 47% de su nómina total, requerimiento indispensable para reducir la circulación de personas. También, se le señaló que la autorización podría quedar sin efecto según la evolución del cuadro epidemiológico y sanitario del Municipio.
Por su parte, ACINDAR se comprometió, bajo declaración jurada, a aplicar los protocolos sanitarios nacionales y los requerimientos de la normativa provincial y municipal, y al estricto cumplimiento del no uso de transporte público de todo su personal.
Giorgi explicó que “se reiteró a la empresa la exigencia de garantizar el traslado de los trabajadores y las trabajadoras, sin la utilización del servicio público de transporte de pasajeros de colectivos, trenes y subtes”. “Este requisito es condición para todas las empresas que solicitan volver a la actividad”, precisó.
Asimismo, deben generar diariamente los registros que detallen la modalidad de transporte para el desplazamiento del personal desde sus hogares a la fábrica, control de temperatura, entrega de elementos de protección personal, capacitación al personal sobre medidas de distanciamiento e higiene y registros de limpieza, que podrán ser requeridos y auditados por el Municipio.
Finalmente, Espinoza aseguró “es falsa la opción ‘salud o economía’. Nosotros, en La Matanza, defendemos la ecuación imprescindible que dice ‘salud para que haya economía’”.