La oposición venezolana, que dice que ganó las elecciones del domingo y disputa la retórica oficial del triunfo del presidente Nicolás Maduro, está buscando formas de llegar al poder pese a los significativos obstáculos que afronta.
Los líderes de la oposición dicen que tienen acceso a alrededor del 80% de las actas de los escrutinios -que por ley deben entregarse a los representantes de los partidos en los recuentos de votos- que muestran que su candidato Edmundo González sumó más del doble de sufragios que Maduro.
Pero el actual mandatario ha declarado la victoria y ha denunciado como un intento de golpe de estado las protestas posteriores a las elecciones. El Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Maduro el lunes, sin dar un desglose de los votos.
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Dos fuentes opositoras que pidieron mantener su nombre en reserva dijeron que por ahora la estrategia de la dirigencia consistiría en presionar a sectores del gobierno al insistir en que disponen de las actas de votación. No detallaron cómo serían esas presiones.
Pero analistas y otros miembros de la oposición señalaron que se manejan varios escenarios: desde que surja una negociación entre gobierno y opositores, a presionar al organismo electoral por la publicación de la información hasta pasar a una fase más caótica de protestas callejeras y en la que el factor militar y policial puedan ser determinantes.
Pero todos esos esfuerzos enfrentan grandes dificultades, de acuerdo con analistas.
"Los retos son grandes (...) Cobrar un triunfo electoral no es sencillo con un gobierno que tiene 25 años", dijo Oswaldo Ramírez, director de la firma local ORC Consultores. "La oposición debe demostrar que posee las actas y enviarlas a los países como prueba de que la voluntad popular se expresó de manera distinta".
Maduro ha ignorado durante años las críticas y ha contado con el apoyo de aliados como China, Rusia, Cuba.
Desde el lunes se registran protestas en varias ciudades del país, muchas de ellas dispersadas por cuerpos de seguridad. Al menos 11 personas han muerto en las manifestaciones, según la no gubernamental Foro Penal.
María Corina Machado, a quien se le prohibió ejercer el cargo pero encabezó la campaña de la oposición, y González han pedido que los militares respeten los resultados. Pero el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino, ha calificado las protestas como un intento de golpe de Estado.
Miembros de la oposición han dicho estar dispuestos a negociar con el Gobierno de Maduro, que por su parte dice que ha llamado más de 1.000 veces al diálogo, pero con sectores que los opositores no reconocen y describen como aliados del oficialismo.
Lo que sucederá "es la pregunta clave", dijo Carmen Beatriz Fernández, de la firma consultora Datastrategia. "Todavía hay una pequeña posibilidad que pase (...) e instalar una negociación" entre las partes para lograr una transición de un gobierno a otro.
Pero en el gobierno "parecieran estar tomando el peor camino para sí mismos y el país" al no presentar todas las actas de votación y poder comparar el resultado de las urnas, agregó Fernández.
¿PUBLICARÁN LOS VOTOS?
El CNE, visto por críticos y opositores como un brazo del gobierno, sólo dio un primer boletín dando ganador a Maduro con 51,2% de los votos y 44% para González. No ha revelado cómo fue la votación a nivel nacional, o el total de sufragios. Su página web está caída desde el domingo.
Países que van desde Estados Unidos hasta Brasil y Chile, y la Unión Europea, entre otros, han pedido al Gobierno de Maduro que muestre los resultados de las 30.000 mesas que funcionaron en la jornada electoral.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y su par estadounidense, Joe Biden, discutieron las elecciones por teléfono el martes y acordaron esperar la publicación de los recuentos de votos antes de tomar una posición definitiva sobre el tema, dijo un funcionario del país sudamericano.
Para resolver la disputa sobre las elecciones de Venezuela, las autoridades deben presentar las actas de votación, agregó Lula.
"Nuestra urgencia en este momento, que los países del mundo viren su mirada hacia Venezuela", dijo a Reuters en Madrid la diputada opositora Dinorah Figuera. "Que utilicen las instituciones que tienen para que se genere la presión tal de que Nicolás Maduro quede más desnudo, más expuesto en este fraude que está exponiendo de manera vergonzosa".
Concretar un traspaso de mando requiere una mezcla de manifestaciones pacíficas en la calle, sumado a una presión internacional, dijo por su parte el presidente de la firma encuestadora Consultores 21, Saúl Cabrera.
Si los datos electorales que "ahora la oposición está enseñando, son de esa magnitud, que dan algo así como 60%, 63% (de González) contra 30% del presidente Maduro. Doblando la votación del segundo candidato, que es el presidente Maduro, y que fue algo muy parejo en todo el país, es muy difícil esconderlo por lo menos a un mediano plazo", agregó.
Con información de Reuters
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