Rusia afirmó hoy que derribó drones ucranianos en cuatro de sus regiones, incluyendo la de Moscú, así como dos misiles ucranianos, al día siguiente de un gran bombardeo ruso contra Kiev, la capital de Ucrania, con estos aviones no tripulados.
Cinco personas resultaron heridas y decenas de edificios quedaron sin luz como consecuencia de los ataques de Rusia en Kiev, que fueron los mayores con drones en la ciudad desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, en febrero de 2022.
El Ministerio de Defensa ruso afirmó hoy en un comunicado que dos drones ucranianos fueron derribados sobre la región de Moscú y que dos misiles fueron interceptados sobre el mar de Azov, en el sur de Ucrania y Rusia, cuando volaban hacia territorio ruso.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
El ministerio dijo más tarde en otro comunicado que las defensas aéreas destruyeron cuatro drones ucranianos sobre las regiones de Briansk, Smolensk y Tula, al suroeste y sur de Moscú, informó la agencia de noticias AFP.
Ucrania indicó por su parte que derribó ocho de nueve drones lanzados sobre su territorio el domingo, al día siguiente del gran ataque con estos artefactos contra la capital.
Kiev afirma que se trató de la mayor oleada de bombardeos con drones desde el inicio del conflicto, con 75 de estos aparatos lanzados por Moscú, la mayoría dirigidos hacia la capital. Ucrania afirma haber derribado a 71.
Ucrania dice temer que una nueva ola de bombardeos rusos masivos contra sus infraestructuras energéticas produzca una situación similar a la del invierno de 2022, cuando millones de personas se quedaron sin electricidad en pleno invierno.
El ataque del sábado coincidió con la conmemoración en Ucrania del Holodomor, la gran hambruna de los años 1930 que provocó la muerte de millones de ucranianos.
Ucrania afirma que fue un "genocidio" perpetrado por el líder soviético Josef Stalin. Rusia subraya por su parte que la hambruna no solo causó víctimas ucranianas, sino también rusas, kazajas y de otras nacionalidades, en un contexto de colectivización de las tierras.
El presidente estadounidense, Joe Biden, acusó ayer a Rusia de dañar "deliberadamente" a los campos y las infraestructuras agrícolas de la ex república soviética.
"La infraestructura agrícola de Ucrania vuelve a ser objetivo deliberado" de Moscú, denunció en un mensaje conmemorativo del Holodomor.
Los ataques de las últimas horas coinciden también con el décimo aniversario de una revolución proeuropea que en 2014 derrocó al anterior Gobierno de Ucrania, que tenía buenas relaciones con Rusia y era apoyado por Moscú.
El derrocamiento del expresidente Viktor Yanukovich, considerado el germen de la invasión rusa, fue rechazado por Rusia y en las regiones rusoparlantes de Ucrania, en algunas de las cuales milicias se alzaron en armas contra el nuevo Gobierno prooccidental.
Rusia apoyó políticamente a los sublevados en las provincias orientales de Donetsk y Lugansk, y luego se anexionó la península ucraniana de Crimea, en el mar Negro.
Unos 14.000 ucranianos murieron en ocho años de ofensiva del Ejército ucraniano contra los separatistas rusoparlantes del este de Ucrania, hasta la invasión rusa de 2022. Desde entonces, el Ejército ruso conquistó grandes partes de las dos provincias, que, además, se anexó.
Diez años después, Rusia sigue considerando la revolución contra Yanukovich como un golpe de Estado ilegítimo y busca instalar un nuevo gobierno en Kiev.
"Hace diez años en Kiev hubo un golpe de Estado por la fuerza y las autoridades legítimas fueron derrocadas", declaró hoy Dmitri Peskov, vocero del presidente ruso, Vladimir Putin.
Con información de Télam