(Actualiza cifra de víctimas)
Nueve personas murieron hoy en bombardeos rusos en el noreste, sur y oeste de Ucrania, incluyendo seis en la ciudad de Kupiansk, informaron autoridades.
Los ataques en Kupiansk y en las ciudades de Jerson y Lviv llegan en medio de una fuerte contraofensiva terrestre ucraniana en zonas ocupadas por Rusia en el sur y este de Ucrania.
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La ofensiva ha dado hasta ahora resultados muy limitados, y Rusia ha continuado con sus bombardeos por detrás de las líneas enemigas, donde golpeó ciudades lejanas a los frentes.
El gobernador de Jarkov, la provincia del noreste de Ucrania donde queda Kupiansk, dijo que "un ataque con una bomba guiada mató a seis personas en la ciudad".
"Cuatro hombres y dos mujeres murieron en Kupiansk por el ataque del enemigo", dijo el gobernador Oleg Synegubov.
"Los servicios de emergencia siguen inspeccionando el lugar de la explosión" en busca de más víctimas, agregó.
En la sureña Jerson, un bombardeo ruso alcanzó un trolebús y provocó la muerte de un policía y dejó heridos a dos pasajeros, uno de los cuales falleció más tarde, informó la autoridad militar de esta ciudad, capital de la provincia del mismo nombre.
El gobernador de la región de Lviv dijo que un ataque nocturno con drones lanzado por Rusia dejó un muerto, informó la agencia de noticias AFP.
El gobernador, Maksim Kozitski, informó que siete drones fueron abatidos, pero que algunos aparatos golpearon depósitos en la ciudad de Lviv, que está a más de 1.000 kilómetros del frente.
Este ataque incendió totalmente un almacén de la ONG Caritas-Spes donde guardaban 300 toneladas de insumos para emergencias, indicó en un comunicado la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) de la ONU.
Allí, la organización también informó que el incremento de las hostilidades impidió el acceso de ayuda humanitaria a la zona en las últimas semanas.
Con información de Télam