La policía española restableció brevemente los controles fronterizos de Gibraltar el viernes, según informó el gobierno gibraltareño, lo que provocó largas colas de trabajadores en hora punta a ambos lados de la frontera, ya que el enclave también empezó a pedir los pasaportes como respuesta.
El gobierno gibraltareño dijo que un inspector de la policía española, que no estaba autorizado a dar esa instrucción, había dado la orden el jueves por la noche de empezar a exigir a los gibraltareños que sellaran su pasaporte para cruzar a España.
Una fuente del Ministerio del Interior español aseguró que lo ocurrido fue "una confusión" y dijo que el ministerio desconocía los detalles de lo que Gibraltar había dicho sobre el incidente.
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"Fue una situación temporal, ya desactivada, que provocó algunas colas a primera hora del día. A las 11 de la mañana, la situación había vuelto a la normalidad", dijo la fuente.
Normalmente, se permite a la gente cruzar la frontera sin controles. Una vez que la Policía Nacional española dejó de pedir pasaportes, Gibraltar siguió su ejemplo y las colas se despejaron.
No fue posible contactar inmediatamente con la policía para que hiciera comentarios.
El estatus de Gibraltar, un enclave en el extremo sur de España que ha estado bajo dominio británico desde el siglo XVIII, y cómo vigilar la frontera han sido puntos de controversia desde que Reino Unido votó en 2016 a favor de abandonar la Unión Europea.
Los controles fronterizos se suprimieron hace más de dos décadas, cuando tanto España como Reino Unido formaban parte de la UE. Desde el Brexit, el acuerdo para dejar viajar libremente a la gente se ha prorrogado temporalmente a la espera de un acuerdo completo entre el bloque, Reino Unido y España, que todavía reclama el enclave.
A principios de esta semana, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, instó a Reino Unido a cerrar un acuerdo sobre el estatus post-Brexit del territorio británico de ultramar antes del inicio de los nuevos controles fronterizos de la UE, que incluyen un sistema biométrico de comprobación de entrada para los ciudadanos no comunitarios.
Con Reino Unido ya fuera de la UE, los controles podrían recrear una frontera dura para Gibraltar.
La Unión Europea retrasó el jueves la introducción de los nuevos controles después de que Alemania, Francia y los Países Bajos dijeran que los sistemas informáticos fronterizos no estaban preparados.
Con información de Reuters
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