El presidente de Paraguay, Santiago Peña, advirtió hoy que en un mundo de tanta riqueza, los niveles de pobreza y desigualdad continúan obstinadamente altos y juzgó que la migración masiva, las guerras, el terrorismo internacional, el crimen transnacional y las tensiones geopolíticas representan retos ante los cuales los mecanismos de cooperación usados en las últimas décadas se encuentran claramente desfasados.
En la misma línea, consideró que también la guerra en Ucrania puso en evidencia debilidades y limitaciones de las instituciones multilaterales en su capacidad para hacer frente a los desafíos con impacto global y riesgo sistémico y reseñó que la ONU y el Consejo de Seguridad adoptaron medidas cuyos resultados penosamente están lejos de ser alentadores.
En su primer discurso ante la asamblea general de la ONU, el mandatario señaló que pese a haber sufrido dos guerras, Paraguay apuesta al diálogo, y no a la fuerza como mecanismo para solucionar cualquier controversia.
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Instó a rusos y ucranianos a detener de inmediato las acciones militares para evitar más víctimas y daños y llamó a fortalecer la ONU con miras a construir nuevas capacidades que le permitan responder con eficacia y eficiencia a los permanentes y cambiantes desafíos globales.
Reclamó que el Consejo de Seguridad refleje la dinámica del escenario internacional sobre bases participativas, democráticas, y equitativas y renovó el respaldo de su país a Taiwán en su aspiración de integrar la ONU como país independiente.
Sobre la tarea en materia de cambio climático, resaltó que Paraguay es un ejemplo a seguir en la transición hacia un mundo más sostenible, porque muestra cómo una nación puede aprovechar los recursos naturales de manera responsable y sostenible para promover el desarrollo económico.
Durante años, fuimos objeto de críticas y señalamientos injustos, pero hoy, gracias al trabajo de múltiples gobiernos, les puedo decir con firmeza que los hechos hablan por sí mismos. El 44% del territorio paraguayo conserva su cobertura forestal. El 95% de la superficie sembrada de cereales y oleaginosas en Paraguay en 2022 implementa tecnologías sostenibles como la siembra directa y la rotación de cultivos y es libre de deforestación desde el 2004, remarcó.
Por otro lado, subrayó que el país aspira a convertirse en el centro logístico del Corredor Vial Bioceánico Sudamericano, lo cual convierte a su centralidad geográfica en una oportunidad y fortalece la integración con países vecinos y mercados del Pacífico.
Con pasos firmes y decididos, Paraguay sigue fortaleciendo su institucionalidad y su economía. Luego de ocupar por décadas el lugar de país más pobre de Sudamérica, hoy somos un país de ingresos medios altos, con alta credibilidad en los mercados financieros internacionales que nos acerca al anhelado grado de inversión, con altos estándares de producción certificados conforme a normas internacionales, con transparencia y sobre todo con una estabilidad macroeconómica que nos destaca a nivel mundial, celebró Peña.
Con información de Télam