El Consejo de Ministros neerlandés se reunió de urgencia el viernes en medio de informaciones que apuntaban a una posible implosión de la coalición por la gestión gubernamental de la violencia relacionada con un partido de fútbol en que participaba un equipo israelí, informaron medios locales.
Nora Achahbar, ministra de Finanzas de la coalición liderada por el partido populista antimusulmán PVV de Geert Wilders, dimitió el lunes por las declaraciones de sus ministros sobre los enfrentamientos en torno al partido por la Europa League entre el Ajax de Ámsterdam y el Maccabi de Tel Aviv, informaron varios medios citando fuentes del gabinete.
La dimisión de Achahbar provocó la reunión de crisis el viernes por la tarde, en la que otros miembros del gabinete de su partido centrista NSC también amenazaron con dimitir, dijeron las emisoras NOS y RTL, citando fuentes gubernamentales.
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Achahbar consideró que varios miembros del gabinete se habían pasado de la raya con comentarios hirientes y posiblemente racistas sobre los ataques a hinchas israelíes en Ámsterdam y los disturbios de los días posteriores al partido, informó el diario neerlandés De Volkskrant.
Wilders ha dicho en repetidas ocasiones que jóvenes neerlandeses de ascendencia marroquí fueron los principales agresores de los hinchas israelíes, aunque la policía no ha dado detalles sobre los antecedentes de los sospechosos.
Ni Wilders ni Achahbar, que nació en Marruecos y fue fiscal antes de incorporarse al gobierno en julio, estaban disponibles para hacer comentarios mientras se celebraba la reunión del gabinete el viernes por la tarde.
Si el partido NSC se retira, los otros tres miembros de la coalición tendrían que seguir adelante como coalición minoritaria o convocar elecciones anticipadas.
La dimisión de Achahbar se produce después de una semana turbulenta en Ámsterdam, donde el departamento de policía local ha dicho que la semana pasada aficionados del Maccabi atacaron un taxi y quemaron una bandera palestina antes de ser perseguidos y golpeados por bandas en patinetes.
Políticos israelíes y neerlandeses han denunciado esos ataques como antisemitas. Activistas propalestinos dijeron que los seguidores del Maccabi se habían armado con palos y piedras a primera hora del día y habían gritado provocadores cánticos antiárabes.
Con información de Reuters
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