El Parlamento de Hungría ratificó hoy la adhesión de Suecia a la OTAN, levantando así el último obstáculo para la entrada del país nórdico que puso fin a décadas de no alineamiento e impulsada por la invasión rusa a Ucrania.
Los legisladores húngaros aprobaron hoy la adhesión de Suecia por una contundente mayoría de 188 votos a favor y 6 en contra.
Tras el pronunciamiento del Parlamento húngaro, el jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que la alianza militar pronto será "más fuerte".
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"Hoy es un día histórico", reaccionó en X el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, cuyo país se convertirá en el 32º miembro de la organización.
"Suecia está lista para asumir sus responsabilidades en materia de seguridad euroatlántica", escribió, casi dos años después de que empezara el proceso de adhesión, informó la agencia de noticias AFP.
"Ahora que todos los aliados lo han aprobado, Suecia se convertirá en el 32º aliado de la OTAN", escribió el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte en X.
"La membresía de Suecia nos hará más fuertes y seguros", señaló.
Por su parte, el jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, consideró que la integración de Suecia a la alianza "fortalecerá" la "seguridad de Europa y del mundo".
Tras el pronunciamiento del Parlamento, la ley pasará al despacho del presidente para ser promulgada en los próximos días.
Según el reglamento de la OTAN, Suecia deberá enviar a Washington los instrumentos de acceso para convertirse en el 32º miembro del pacto.
Suecia enfrentó un camino lleno de obstáculos para entrar en el pacto militar, que incluyeron la difícil negociación para obtener el visto bueno de Turquía, que concluyó en enero.
Además, tuvo que convencer al primer ministro húngaro, el político nacionalista Viktor Orban, ya que el protocolo de adhesión requiere el acuerdo unánime de los miembros.
La solicitud de Suecia de ingresar en la OTAN rompió una política de no alineamiento que el país sostuvo durante décadas y que estaba anclada en el rechazo de la mayoría de la población.
La invasión de Ucrania, el 24 de febrero de 2022, marcó un cambio drástico en la actitud de los partidos políticos suecos y en la opinión pública, y en mayo de 2022 la mayoría del Parlamento votó a favor de solicitar el ingreso en la alianza militar atlántica.
El pedido sueco se realizó al mismo tiempo que el de Finlandia, que en abril de 2023 se convirtió en el 31º miembro de la organización.
Al inicio de la sesión parlamentaria, Orban ensalzó la reciente visita a Budapest de Kristersson, que contribuyó, según él, a construir "una relación justa y respetuosa entre los dos países" más allá de las "divergencias de opiniones".
"La entrada de Suecia en la OTAN reforzará la seguridad de Hungría", añadió.
La visita de Kristersson allanó las tratativas y durante su viaje, Hungría anunció la compra de cuatro cazas a Suecia.
Para algunos expertos, la dilatación del visto bueno de Hungría fue una estrategia para negociar con la Unión Europea el desbloqueo de miles de millones de euros en fondos que están congelados.
Otros analistas señalaron como motivo la cercanía de Orban al presidente ruso, Vladimir Putin, y el jefe de Estado turco, Recep Tayyip Erdogan, que explicó su reticencia por motivos de seguridad.
Las fuerzas armadas suecas cuentan con 50.000 soldados, de los cuales cerca de la mitad son reservistas, pero el primer ministro declaró en enero que su país está dispuesto proveer tropas a las fuerzas de la OTAN en Letonia.
Pero geopolíticamente, tras el ingreso de Finlandia, la entrada de Suecia implica para Rusia que el mar Báltico está ahora rodeado de países miembros de la OTAN, y algunos analistas lo describen como un "lago de la OTAN".
Con información de Télam