El senador Giorgio Napolitano, presidente emérito de Italia, murió hoy en Roma a los 98 años, pérdida que fue lamentada mediante un mensaje laudatorio por el papa Francisco.
Napolitano, que se encontraba hospitalizado en la clínica capitalina Salvator Mundi de Gianicolo, había sido sometido a una cirugía abdominal en mayo de 2022, de la cual empeoró en los últimos días.
El papa Francisco, que se encuentra en Marsella, Francia, para un viaje de dos días, lo recordó como un hombre que "buscó siempre el bien común".
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En un telegrama enviado a su esposa, Clio Bottoni, el sumo pontífice destacó que su deceso despertó en él "sentimientos de emoción y al mismo tiempo de agradecimiento".
"Fue un estadista que en el desempeño de sus altos cargos institucionales demostró grandes cualidades intelectuales y una sincera pasión por la vida política italiana, así como un gran interés por el destino de las naciones", ponderó el papa argentino, según reporte de la agencia de noticias ANSA.
Considerada una de las figuras políticas más respetadas del país, Napolitano fue el undécimo presidente de la historia de la República Italiana y el primero en ser reelegido para un segundo mandato, sentando un precedente que seguiría su sucesor, Sergio Mattarella.
Dirigió el Estado entre mayo de 2006 y enero de 2015, cuando renunció por vejez.
También fue titular de la Cámara de Diputados (1992-1994), ministro del Interior (1996-1998) y de Defensa Civil (1996-1998), además de ejercer como parlamentario durante casi 40 años.
Actualmente, era senador vitalicio, cargo al que tienen derecho todos los presidentes eméritos de Italia.
Con información de Télam
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