Las autoridades de Transnistria, una región separatista prorrusa de Moldavia fronteriza con Ucrania, adoptaron este miércoles una declaración oficial por la que piden la "protección" de Rusia.
En la declaración, citada por las agencias de noticias rusas, las autoridades secesionistas piden a Moscú "aplicar medidas para proteger Transnistria frente a la presión reforzada por parte de Moldavia", cuyo Gobierno central adoptó medidas económicas que consideran adversas al exiguo territorio.
La postura fue elaborada en una reunión de diputados de la región separatista prorrusa en un congreso oficialmente centrado en cuestiones económicas, que genera temores de un pedido de anexión a Rusia, reportó la agencia de noticias AFP.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
La última vez que las autoridades de este pequeño territorio entre Moldavia y Ucrania celebraron un congreso similar fue en 2006 para organizar un referendo sobre una integración a Rusia que no fue reconocido por la comunidad internacional.
Después del colapso de la Unión Soviética, esta región rusoparlante proclamó su secesión y libró una corta guerra contra el Ejército moldavo en 1992.
Desde entonces, Rusia mantiene allí una presencia oficial de 1.500 militares en presunta misión de paz.
Desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania, hace poco más de dos años, surgen regularmente especulaciones sobre un hipotético ataque ruso desde Transnistria hacia la cercana ciudad ucraniana de Odesa, a orillas del mar Negro.
También aumentaron las tensiones con las autoridades de Kiev, a quienes acusaron de querer atacar este territorio y preparar un atentado frustrado contra los dirigentes de esta república autoproclamada.
La semana pasada, el Ministerio de Defensa ruso acusó a Ucrania, sin presentar pruebas, de preparar una "provocación armada" contra Transnistria.
Con 465.000 habitantes, mayoritariamente rusoparlantes, Transnistria es un estrecho territorio a orillas del río Dniester cuya independencia no ha sido reconocida por la comunidad internacional, ni siquiera por Moscú.
Sin embargo, Rusia considera esta república proclamada como una potencial cabeza de puente cerca de las fronteras de la Unión Europea.
Regularmente, Moldavia y la Unión Europea acusan a Moscú de querer desestabilizar esta antigua república soviética, ahora con un liderazgo firmemente proeuropeo.
En diciembre de 2023, la Unión Europea decidió abrir negociaciones de adhesión tanto con Ucrania como con Moldavia.
Con información de Télam