El líder de la extrema derecha holandesa, Geert Wilders, expresó el viernes su "rabia y vergüenza" por las agresiones a seguidores de fútbol israelíes en Ámsterdam, en una conversación telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Los israelíes seguidores del club Maccabi Tel Aviv que se encontraban en la ciudad holandesa para disputar un partido contra el Ajax fueron atacados durante la noche por lo que su alcaldesa calificó de "escuadrones antisemitas". Al menos cinco personas fueron atendidas en el hospital.
Wilders, que encabeza el partido más grande del Gobierno, dijo en la red social X que en su llamada con Netanyahu "(le) hablé de mi rabia y vergüenza por lo ocurrido en Ámsterdam".
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La agencia de noticias holandesa ANP informó de que Wilders iba a reunirse más tarde con el ministro de Relaciones Exteriores israelí, Gideon Saar, y con el portavoz parlamentario, Amir Ohana, en el aeropuerto Schiphol de Ámsterdam.
Reuters no pudo verificar de inmediato si eso ocurrió.
El primer ministro holandés, Dick Schoof, también habló con Netanyahu el viernes. Schoof asistía a una cumbre de líderes de la Unión Europea en Budapest cuando ocurrieron los hechos, pero tenía previsto regresar a Países Bajos antes de tiempo.
(Editado en español por Carlos Serrano)
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