El primer ministro británico, Rishi Sunak, defendió hoy su nuevo plan de deportación de imigrantes ilegales a Ruanda, en medio de tensiones internas en su Partido Conservador y horas después de la renuncia de su ministro de Inmigración, Robert Jenrick.
Jenrick dimitió anoche después de que Sunak presentara un proyecto de ley para deportar a inmigrantes ilegales del Reino Unido a Ruanda luego de que la Justicia británica vetara un acuerdo a esos fines firmado entre los Gobiernos de ambos países.
El máximo tribunal del Reino Unido falló contra el acuerdo el mes pasado al considerar que la nación africana no cae dentro de la categoría de "país seguro" al que puedan deportarse refugiados sin riesgos de que sufran consecuencias.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
En su carta de renuncia, Jenrick cuestionó el proyecto de ley porque consideró que sería impugnado nuevamente en los tribunales al incumplir las obligaciones del Reino Unido en materia de derechos humanos.
Según la prensa británica, la salida de Jenrick es vista como parte de un movimiento más amplio dentro del partido, que busca asegurar que el Reino Unido tenga la capacidad de actuar unilateralmente en sus políticas de deportación.
En una conferencia de prensa en su residencia oficial de Downing Street, en Londres el premier Sunak destacó que el proyecto de ley hará que sea "extremadamente rara" la posibilidad de que los tribunales bloqueen las decisiones de deportación.
Aunque no estuvo de acuerdo con el fallo del Tribunal Supremo que anuló el primer acuerdo firmado con Ruanda, dijo que respetó su decisión y aseguró que el nuevo proyecto de ley aborda las preocupaciones expresadas por los jueces.
El proyecto de ley incluye cláusulas que harán que las impugnaciones legales "sean limitadas", enfatizó Sunak al defender el nuevo acuerdo firmado esta semana.
"Hoy el gobierno introdujo la ley contra la inmigración ilegal más estricta jamás creada. Sé que molestará a algunas personas y escucharás muchas críticas al respecto. Es correcto explicar por qué he decidido hacer esto. Soy hijo de inmigrantes. Entiendo por qué algunas personas se arriesgan a subirse a embarcaciones inseguras para cruzar aguas abiertas", afirmó Sunak, que nació de padres de ascendencia india.
En ese sentido, subrayó la importancia de la migración legal y dijo que "si se permite venir ilegalmente al Reino Unido, se destruirá la confianza de la gente en el sistema".
Al ser interrogado por periodistas sobre si estaba perdiendo autoridad dentro de su Partido Conservador y sobre un posible problema de confianza en él, Sunak evadió la pregunta directa, insistiendo en su historial.
"Desde que estoy aquí, hemos reducido los números en un tercio", afirmó refiriéndose a las llegadas de inmigrantes ilegales que cruzan en pateras el Canal de la Mancha, desde Francia.
"Estamos devolviendo a más de 20.000 personas", expresó.
En respuesta a la renuncia de Jenrick, quien argumentó que los planes actuales no son suficientemente exhaustivos, la ex ministra del Interior Suella Braverman instó a Sunak a "cambiar de rumbo".
Braverman, quien fue despedida por Sunak el mes pasado, expresó en BBC Radio 4 que quiere que el primer ministro consiga detener los barcos que traen a inmigrantes ilegales a través del Canal de la Mancha.
También señaló que el Gobierno "no puede seguir fallándole al pueblo británico" y que el nuevo proyecto de ley de Ruanda "no funcionará y no detendrá los barcos".
La situación política de Sunak se complica aún más con recientes cifras que muestran un récord de migración legal neta al Reino Unido, mientras crece la presión para encontrar una solución efectiva y legalmente sostenible a los desafíos migratorios del país.
Las últimas estadísticas disponibles revelaron que la migración neta al Reino Unido alcanzó una cifra récord de 745.000 en el año 2022.
Con información de Télam