Una destacada activista anticorrupción pidió el miércoles a la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, renunciar a su cargo luego de que esta semana fuera difundido un vídeo de hace 10 años en el que aparece su cuñado pidiendo a un narcotraficante supuestas donaciones para su campaña de entonces.
El vídeo apareció una semana después de que la izquierdista Castro ordenara poner fin a un tratado de extradición con Estados Unidos, que se utilizó para llevar a su predecesor conservador a juicio en Nueva York, condenado por cargos derivados del tráfico de drogas.
Gabriela Castellanos, directora del Consejo Nacional Anticorrupción, dijo a través de una carta publicada en X, que la presidenta debería renunciar debido a "las serias acusaciones de narcotráfico que han sido presentadas contra el entorno familiar".
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Que Castro permanezca en el cargo, agregó, "constituye una grave violación de la confianza pública y de los principios éticos que deben regir el desempeño de cualquier servidor público". El documento publicado no incluía pruebas del supuesto acto de corrupción mencionado.
Los videos muestran al exlegislador Carlos Zelaya, hermano del esposo de Castro, el exmandatario Manuel Zelaya, reunido en 2013 con un líder de la organización Los Cachiros, dedicada al tráfico de droga, y fueron publicados el martes por InsightCrime y la cadena estadounidense en español Univision.
En el video, presuntos narcotraficantes ofrecen dinero para la campaña de Castro, apenas días antes de que ella perdiera una candidatura presidencial anterior.
La oficina de presidenta en Honduras no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre las acusaciones.
La semana pasada, Carlos Zelaya dijo a periodistas que se reunió con un grupo de personas para discutir una contribución a la campaña, pero aseguró que no sabía que se tratara de narcotraficantes.
También presentó su renuncia al Congreso.
A fines del mes pasado, Castro ordenó terminar con un tratado de extradición con Estados Unidos, desatando críticas del embajador estadounidense luego de una reunión entre funcionarios de defensa hondureños y el ministro de defensa de Venezuela, que enfrenta cargos de narcotráfico en Estados Unidos.
En ese momento, dijo que había un complot golpista en su contra y se comprometió a impedir que el acuerdo de extradición se utilizara para "intimidar o chantajear" a su gobierno.
Castro, elegida hace tres años con la promesa de acabar con el narcotráfico y la corrupción en la nación centroamericana, acusó con frecuencia a su predecesor, Juan Orlando Hernández, de liderar una "narcodictadura".
El hermano de Hernández, también exlegislador, fue arrestado en Estados Unidos en 2018 y condenado por tráfico de drogas al año siguiente.
Durante más de un siglo, Estados Unidos ha desempeñado un papel importante en la política hondureña, con bases militares allí desde la Guerra Fría y respaldando a Hernández incluso después de las denuncias de fraude en su reelección de 2017.
Con información de Reuters
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