Los cancilleres del G7 expresaron hoy su apoyo a "pausas y corredores humanitarios" en la ofensiva de Israel contra Hamas en la palestina Franja de Gaza, pero sin pedir un alto el fuego, al tiempo que ratificaron su apoyo a Ucrania en la guerra con Rusia, al concluir su reunión de dos días en Japón.
"Apoyamos que haya pausas y corredores humanitarios para facilitar ayuda urgente, el movimiento de civiles y la liberación de los rehenes" capturados por el movimiento islamista palestino Hamas, dijeron los ministros en un comunicado conjunto reproducido por la agencia de noticias AFP.
Además, destacaron el "derecho de Israel a defenderse a sí mismo y a su pueblo, cumpliendo con la legislación internacional, para evitar que se repitan" ataques como el cometido el 7 de octubre en suelo israelí que desencadenó la nueva escalada de violencia.
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"Instamos a Irán a abstenerse de apoyar a Hamas y de llevar a cabo más acciones desestabilizadoras en Medio Oriente, incluyendo el apoyo al (movimiento libanés) Hezbollah y a otros actores no estatales, y a utilizar su influencia en esos grupos para que las tensiones regionales se reduzcan", indicaron los jefes diplomáticos del Grupo de los Siete (conformado por Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido).
"Subrayamos que la solución de dos Estados que estipula que Israel y Palestina convivan en paz, seguridad y reconocimiento mutuo, sigue siendo la única vía hacia una paz justa, duradera y segura", resaltaron.
El ejército israelí bombardea la Franja de Gaza desde el 7 de octubre, cuando milicianos de Hamas lanzaron un ataque contra su territorio que dejó más de 1.400 muertos, la mayoría civiles, además de unas 240 personas como rehenes, entre ellas una veintena con nacionalidad argentina.
El Ministerio de Salud en Gaza, territorio gobernado por Hamas, aseguró que el balance en el enclave palestino supera los 10.500 fallecidos, entre ellos más de 4.300 niños.
Los combates ya tienen lugar también por tierra en la propia Franja de Gaza y, en ese marco, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que su país asumirá "la responsabilidad general de la seguridad" de la zona después de la guerra.
El ministro israelí de Asuntos Estratégicos israelí, Ron Dermer, matizó hoy las declaraciones del premier y aseguró que "no habló de ocupar Gaza" después del fin de las hostilidades con Hamas, que gobierna ese territorio costero.
Sin embargo, cuando fue consultado sobre cómo ejercerá esta responsabilidad, Dermer -que participa como observador en el gabinete de guerra israelí- dijo que la cuestión está todavía abierta.
En este marco, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, llamó hoy a Israel a no ocupar el enclave palestino, del que los israelíes se retiraron unilateralmente en 2005.
En declaraciones a la prensa tras la reunión con sus pares, Blinken dijo que no debería producirse "ninguna reocupación de Gaza después del conflicto".
Los cancilleres del G7 también debatieron sobre la guerra en Ucrania y reiteraron su "compromiso firme en que su apoyo a Ucrania en su lucha por su independencia, soberanía e integridad territorial nunca decaerá".
"Además, instamos a China a no ayudar a Rusia en su guerra contra Ucrania, a presionar a Rusia para que pare su agresión militar y a apoyar una paz justa y duradera en Ucrania", señalaron los cancilleres.
El presidente ruso, Vladimir Putin, señaló hoy que la cooperación militar entre Rusia y China es "cada vez más importante", pero aseguró que los dos países no buscan crear una alianza similar a la de la guerra fría.
"Nuestros contactos en el ámbito militar y técnico-militar son cada vez más importantes", afirmó Putin, que recibió en Moscú al general chino Zhang Yuxia, vicepresidente de la comisión militar central.
El ministro de Relaciones Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, intervino en la reunión del G7 por videoconferencia.
Previamente, el canciller japonés Yoko Kamikawa, había apuntado que "incluso si las tensiones aumentan en Medio Oriente, es importante para el G7 estar unido en enviar un claro mensaje a la comunidad internacional de que nuestro compromiso firme en apoyar Ucrania nunca vacilará".
En el vigésimo mes de guerra y con la contraofensiva de Kiev intentando ganar terreno, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se reunió en reiteradas ocasiones con líderes occidentales para intentar disipar el cansancio alrededor del conflicto.
La ministra de Relaciones Exteriores alemana, Annalena Baerbock, había anticipado que los países del G7 estaban trabajando para ayudar a Ucrania ante un segundo invierno boreal en el que prevén nuevos ataques rusos contra las instalaciones energéticas.
"Si nuestro respaldo a Ucrania decae ahora, (Rusia) lo explotará sin piedad, con consecuencias terribles para los ucranianos y los europeos. Otros actores en distintas partes del mundo sacarían también malas conclusiones", dijo Baerbock.
En su cumbre, los cancilleres también instaron a "mantener la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán para la seguridad y la prosperidad de la comunidad internacional", ante las renovadas tensiones diplomáticas y militares entre la isla y Beijing por la disputa de soberanía.
En el comunicado final, también respaldaron "la promoción de una sólida y sostenida paz entre Armenia y Azerbaiyán", países del Cáucaso que ya libraron guerras y ofensivas armadas en el enclave de Nagorno Karabaj.
"Subrayamos nuestro apoyo a la promoción de una sólida y sostenida paz entre Armenia y Azerbaiyán, basada en los principios de no empleo de la fuerza, el respeto a la soberanía, la inviolabilidad de las fronteras y la integridad territorial", señaló un párrafo del documento citado por la agencia de noticias Sputnik.
La próxima reunión de ministros de Asuntos Exteriores del G7 en 2024, presidida en ese entonces por Italia, se celebrará en abril en la isla de Capri.
Con información de Télam