Un segundo abogado de la campaña de Donald Trump para las elecciones de 2020 llegó a un acuerdo de culpabilidad con la justicia hoy por el cual testificará para la Fiscalía en el caso que alega que el expresidente de Estados Unidos lideró una conspiración criminal para revertir su derrota en el estado de Georgia.
Kenneth Chesebro, de 62 años, fue acusado formalmente en agosto junto con Trump y otras 17 personas por orquestar un plan para presentar una lista de electores falsos al Congreso, en un intento por bloquear la certificación de la victoria electoral del demócrata Joe Biden ese año, detalló la agencia de noticias AFP.
La selección del jurado para su juicio comenzó hoy en el tribunal del condado de Fulton, Georgia, pero se detuvo abruptamente después de que Chesebro llegara a un acuerdo sorpresa de última hora con los fiscales.
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Así, el letrado enfrentó siete cargos, entre ellos extorsión (un delito grave que conlleva pena de cárcel) y también conspiración para cometer falsificación y conspiración para presentar documentos falsos.
Sin embargo, únicamente se declaró culpable del cargo de conspiración para presentar documentos falsos a cambio de una sentencia de libertad condicional y la retirada de los demás cargos.
La declaración de culpabilidad de Chesebro se produjo después de que otra exabogada de la campaña de Trump, Sidney Powell, de 68 años, llegara también a un acuerdo con los fiscales que la conminaron a testificar en los próximos juicios de otros coacusados.
Powell era una firme partidaria de Trump que impulsaba extravagantes teorías de conspiración sobre la manipulación extranjera de las máquinas de votación.
Además de estos dos conocidos abogados, un primer acusado, Scott Hall, ya se había declarado culpable por este caso el 29 de septiembre.
El expresidente enfrenta un juicio que comenzará en marzo de 2024 por conspiración para revertir el resultado de las elecciones de 2020, otro en mayo por manejo indebido de documentos secretos, y actualmente uno en el ámbito civil junto a su hijo mayor por presuntamente inflar el valor de sus propiedades para obtener ventajas en préstamos y seguros.
Pese a estas causas, el magnate es el favorito para la nominación presidencial del Partido Republicano para los comicios de 2024 y sostuvo en varias oportunidades que es víctima de "una caza de brujas" por su intención de presentarse nuevamente a las elecciones.
Con información de Télam