La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, está potencialmente preparada para convertirse en la candidata demócrata en las elecciones de noviembre.
Estas son sus opiniones y acciones en relación con algunos temas empresariales clave:
GRANDES TECNOLÓGICAS
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Como candidata a fiscal general de California, Harris aseguró a posibles donantes que es "una capitalista". Por lo general, se la ha visto muy cercana a destacados ejecutivos e inversores del sector tecnológico, la industria local en el área de la Bahía de San Francisco. Asistió a la boda de Sean Parker, uno de los primeros ejecutivos de Facebook. Su cuñado, Tony West, es el director jurídico de Uber.
También aceptó donaciones de Reid Hoffman, destacado inversor de capital riesgo y cofundador de LinkedIn, así como del multimillonario John Doerr y del inversor de capital riesgo Ron Conway. Grandes ejecutivos de la tecnología también la apoyaron, como Sheryl Sandberg, entonces directora de operaciones de Facebook, y Marc Benioff, el multimillonario CEO de Salesforce.
REGULACIÓN TECNOLÓGICA
Como fiscal general de California, Harris demandó a eBay en 2012, alegando prácticas de contratación anticompetitivas en torno a un acuerdo de no contratación con Intuit que condujo a un trato de casi 4 millones de dólares en 2014.
Uno de sus temas emblemáticos fue la reducción de la distribución de pornografía en las redes sociales, en particular la "porno venganza", una práctica que consiste en publicar fotos explícitas sin el consentimiento de la persona.
Se atribuyó el mérito de una campaña de presión que llevó a Facebook, Alphabet Google, Microsoft y otros a tomar medidas para eliminar determinadas imágenes explícitas.
"No puedo enfatizar lo suficiente cómo los líderes en tecnología han dado un paso adelante", dijo Harris en una conferencia de prensa en aquel momento.
CLIMA Y ENERGÍA
La posición de Harris sobre el clima y la energía son similares a las del presidente Joe Biden. Pero a lo largo de su carrera ha dejado claro que la energía limpia y la justicia medioambiental son prioridades.
En el momento en que Biden anunció a Harris como su compañera de fórmula en la carrera de 2020, hizo hincapié en su dura postura contra las grandes petroleras cuando ocupó puestos clave en California, señalando las demandas que había puesto en marcha como fiscal del distrito de San Francisco de 2004 a 2011 y luego como fiscal general del estado hasta enero de 2017, cuando se convirtió en senadora.
Como fiscal general de California, Harris logró acuerdos multimillonarios con Chevron y BP por supuestas infracciones de contaminación de tanques subterráneos de almacenamiento de combustible.
Es partidaria de la estrategia del Gobierno de Biden para ampliar la energía eólica marina y otras energías renovables mediante subastas de arrendamientos y subvenciones, lo que contrasta con Trump, un defensor de los combustibles fósiles que ha criticado la energía eólica marina y otras tecnologías de energías limpias.
El año pasado, Harris debutó en las negociaciones internacionales sobre el clima, anunciando un compromiso de 3.000 millones de dólares con el Fondo Verde para el Clima y pronunciando su primer gran discurso internacional centrado en el clima.
Como vicepresidenta, Harris también ha participado en la puesta en marcha de políticas de la Agencia de Protección Medioambiental que abordan cuestiones de justicia ambiental.
WALL STREET
Harris era conocida por su dureza con los grandes bancos como fiscal general de California. En 2011 se retiró de las conversaciones entre los grandes bancos y los fiscales generales de los estados por un acuerdo que obligaría a los prestamistas a ayudar a los consumidores perjudicados por las ejecuciones hipotecarias y las prácticas de préstamos abusivos.
Posteriormente, los bancos más que cuatriplicaron el dinero prometido para ayudar a los californianos a reducir la cantidad que debían por sus hipotecas.
Bajo el mandato de Harris, California inició una investigación penal sobre Wells Fargo en 2016 en relación con las acusaciones de que el banco abrió millones de cuentas de clientes y tarjetas de crédito no autorizadas.
Según reportes, varios nombres importantes de Wall Street apoyan a Harris.
FARMACÉUTICAS
Harris se ha opuesto a la consolidación en el sector de salud por temor a que el aumento de tamaño de las empresas se traduzca en precios más altos para los consumidores.
Como fiscal general de California, presentó con éxito varias demandas antimonopolio contra fabricantes de medicamentos, aseguradoras médicas y sistemas hospitalarios, e inició un caso histórico contra Sutter Health, el sistema de 24 hospitales del norte de California, que finalmente fue presentado por su sucesor.
Inició investigaciones similares contra otros grandes operadores del Estado. Se centró en los costos de la asistencia fuera de la red y las fusiones en muchos niveles del sistema, como los grupos de médicos.
Consiguió acuerdos con pesos pesados del sector, como un acuerdo de 23,5 millones de dólares con McKesson y de 241 millones de dólares con Quest Diagnostics en demandas por precios inflados de medicamentos y sobreprecios ilegales en el sistema Medicaid de California.
Partidaria desde hace tiempo de la Ley de Asistencia Sanitaria Asequible, también señaló recientemente la limitación de los precios de la insulina como un signo de la política del gobierno Biden-Harris para mantener asequible la asistencia sanitaria.
INTELIGENCIA ARTIFICIAL
Como vicepresidenta, Harris ha advertido a los ejecutivos tecnológicos de que tienen la obligación "moral" de protegerse de los posibles peligros de la IA.
Ha respaldado un decreto de Biden sobre IA que busca una mayor protección de los consumidores, destacando las llamadas fraudulentas generadas por IA y las repercusiones de los contenidos generados por IA sin etiquetar.
Con información de Reuters