El presidente saliente de México, Andrés Manuel López Obrador, y la mandataria entrante, Claudia Sheinbaum, rechazaron el viernes los últimos comentarios del candidato republicano a las elecciones de Estados Unidos, Donald Trump, sobre la migración y sus planes para atajarla.
Trump dijo el jueves en el cierre de la convención republicana, donde aceptó su nominación, que si gana la elección de noviembre cerrará la frontera con México y calificó de "invasión" la llegada de inmigrantes, a los que acusó también de propagar enfermedades, miseria y crimen.
"Le voy a mandar una carta, lo anuncio, a mi amigo Donald Trump porque pienso que no les están informando bien sobre el tema migratorio y también sobre la importancia que tiene mantener la integración económica entre Estados Unidos, México y Canadá", dijo López Obrador en su conferencia de prensa diaria.
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Durante la campaña electoral que lo llevó a la presidencia en 2016, Trump desató indignación en México al llamar violadores y narcotraficantes a los migrantes del país latinoamericano, y ya como mandatario impulsó varias medidas duras de control migratorio que tensaron la relación con el Gobierno mexicano.
Más tarde, Sheinbaum, aliada de López Obrador en el partido oficialista Morena, dijo a periodistas que "la migración no es un asunto de crimen" y argumentó que para disminuir los flujos de personas que intentan llegar a la frontera con Estados Unidos es necesario invertir en el desarrollo de sus países de origen.
"En vez de construir muros, (hay que) apoyar a los países y a las personas", afirmó la próxima presidenta, que asumirá el poder en octubre tras ganar en las urnas el 2 de junio. "Vamos a esperar a las elecciones en EEUU. Lo que se decida, vamos a trabajar bien", agregó sobre un potencial triunfo de Trump.
Con información de Reuters
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