El recién nombrado responsable brasileño de la cumbre climática COP30 prevista para 2025 en la ciudad amazónica de Belém advirtió el martes de que la decisión del presidente Donald Trump de retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París ensombrecería las conversaciones.
"Todavía estamos analizando los anuncios del presidente Trump, pero no hay duda de que tendrán un impacto significativo en la preparación de la COP30", dijo el martes a la prensa el embajador André Correa do Lago, poco después de ser nombrado para el cargo.
Trump retiró a Estados Unidos del pacto de 2015 justo después de asumir el cargo por segundo mandato no consecutivo el lunes, apartando al mayor emisor histórico de gases de efecto invernadero del mundo de los esfuerzos globales para combatir el cambio climático por segunda vez en una década.
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La decisión se suma a los retos a los que ya se enfrentaba Brasil como anfitrión de la COP30, incluidas las duras disputas sobre la financiación de la transición energética en los países en desarrollo y los nuevos compromisos de reducción de emisiones que los países se han comprometido a asumir.
Correa do Lago dijo que "todavía hay muchos caminos de diálogo" con Estados Unidos, a pesar del último movimiento de Trump, y señaló que el país sigue siendo miembro de la convención climática de las Naciones Unidas, un foro de diálogo entre naciones sobre la política climática global.
El anuncio del jefe de la COP30 es el punto de partida para que el Gobierno brasileño establezca la estructura de liderazgo que llevará a cabo las negociaciones de la que probablemente será una de las conferencias más difíciles de los últimos años.
En su nuevo cargo, Correa do Lago actuará como principal facilitador y mediador entre las delegaciones de los países en la cumbre de noviembre.
La presidencia se considera esencial para el éxito de la conferencia, en la que los líderes de casi todas las naciones del planeta negociarán cómo mantener el calentamiento global por debajo de niveles catastróficos, tras dos años de calor récord.
La elección de Correa do Lago por parte del Presidente Luiz Inácio Lula da Silva marca el regreso de la dirección de la conferencia a manos de funcionarios con un historial de trabajo en política climática.
Correa do Lago ha sido el negociador de Brasil en las cumbres mundiales sobre el clima desde 2023, papel que también desempeñó entre 2011 y 2013, y ha trabajado en diplomacia climática y desarrollo sostenible desde 2001.
(Reportaje de Lisandra Paraguassu, edición de Manuela Andreoni, Michael Perry y Aurora Ellis. Editado en español por Juana Casas)
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