El líder opositor surcoreano Lee Jae-myung, apuñalado en el cuello ocho días atrás por un hombre que se hizo pasar por un simpatizante, reclamó "terminar con las políticas beligerantes" al recibir hoy el alta hospitalaria.
El presidente del Partido Democrático estaba rodeado por periodistas en la ciudad meridional de Busán el 2 de enero cuando un hombre se abrió paso entre la multitud, lo embistió y lo apuñaló en el lado izquierdo del cuello causándolo una herida en la vena yugular.
El político de 60 años fue enviado primero a un hospital en Busán y luego trasladado por vía aérea a Seúl donde se le practicó una cirugía de casi dos horas.
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Al recibir el alta hospitalaria ocho días después, Lee dijo que el incidente debe servir para revisar la política de confrontación del país.
"Espero que este incidente sirva de hito para terminar con las políticas del odio y restaurar una política de respeto y convivencia", manifestó en sus primeras declaraciones tras la agresión.
El sospechoso es un agente inmobiliario de 66 años que atravesaba dificultades financieras y no podía pagar el alquiler de su oficina durante siete meses, según la agencia local de noticias Yonhap, reseñada por AFP.
El suceso se viralizó en todo el mundo debido a que el político se encontraba haciendo declaraciones a la prensa frente a las cámaras de televisión cuando su agresor irrumpió en la escena vistiendo una remera que lo presentaba como simpatizante, supuestamente con la intención de pedirle un autógrafo.
La política en Corea del Sur es notoriamente conflictiva y varias figuras de alto perfil han sido atacadas en público en los últimos años.
En 2022, el predecesor de Lee en el Partido Democrático, Song Young-gil, recibió un golpe de un objeto contundente por parte de un hombre mayor.
Y en 2006, Park Geun-hye, entonces líder del partido conservador que se convertiría después en presidenta fue atacada con un cuchillo en un mitin, una acción que le dejó una cicatriz en el rostro.
Lee perdió las elecciones presidenciales de 2022 contra el conservador Yoon Suk-yeol en una de las contiendas más reñidas de la historia del país.
Se trata de un político con orígenes obreros que ganó gran popularidad con su historia de superación, después de haberse recuperado de un accidente en una fábrica donde trabajó cuando era adolescente y que le dejó secuelas de por vida.
Después, logró estudiar derecho y entró en la política en 2010.
Durante la campaña presidencial varios escándalos de corrupción complicaron sus opciones, pero sigue siendo un político popular, según las últimas encuestas, y se espera que vuelva a presentarse en 2027.
Lee niega haber cometido delito alguno y asegura que las acusaciones en su contra son una "ficción" y una "conspiración política".
Con información de Télam