(Actualiza con el llamado de los sindicatos a suspender los bloqueos)
Los principales sindicatos agrarios llamaron hoy a suspender los bloqueos en Francia, en respuesta a los anuncios del gobierno para desactivar dos semanas de protestas agrícolas que sacuden a la segunda economía de la Unión Europea (UE).
"En vista de todo lo que se ha anunciado", "hacemos un llamado a nuestras redes (...) para que suspendan los bloqueos y emprendan una nueva forma de movilización", declararon en rueda de prensa los líderes de la FNSEA, Arnaud Rousseau, y de Jóvenes Agricultores, Arnaud Gaillot.
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El primer ministro francés, Gabriel Attal, y tres de sus ministros presentaron este plan, cuando las protestas sobrepasaron las fronteras de la segunda economía de la UE y se extendieron a otros países como Italia, Portugal y Grecia, a la espera de la entrada en juego de los agricultores españoles en las "próximas semanas".
El objetivo de las nuevas medidas es "reconocer mejor el oficio de agricultor, restaurar los ingresos, proteger contra la competencia desleal", también contempla un mayor control del origen de los productos, ayudas al sector ganadero y la suspensión temporal de un plan para reducir el uso de pesticidas, aseguró Attal, quien reiteró la oposición "clara y firme" de Francia al acuerdo comercial UE-Mercosur.
El Gobierno del presidente Emmanuel Macron prevé "más de 10.000 controles del origen francés de los productos con sanciones que pueden alcanzar un 10% de la facturación de los industriales o distribuidores", dijo el ministro de Economía, Bruno Le Maire.
Francia destinará 162 millones de dólares "de manera perenne" a ayudas fiscales y sociales para los ganaderos y pedirá una definición "clara" en la UE de "lo que es la carne cultivada", agregó Le Maire, informó la agencia de noticias AFP.
Sobre los pesticidas, el Gobierno dejará "en suspenso" el plan nacional Ecophyto, que fija objetivos de reducción de su uso, y prohibirá la importación de frutas y verduras tratadas con tiacloprid, un insecticida prohibido en la UE, dijo Attal.
Francia pidió además a la UE la adopción de "cláusulas de salvaguardia" para el sector agrícola en los acuerdos comerciales, como para las aves de corral importadas desde Ucrania, y expresó su preocupación por los cereales ucranianos, prosiguió el premier.
Esta tercera serie de medidas en menos de dos semanas "responde a una gran parte de las expectativas" de los agricultores, aseguró el primer ministro, para quien "el trabajo continuará", agregó.
En Francia, el sector agropecuario ha retrocedido fuertemente desde el 18,1% del PBI en 1949, en plena reconstrucción tras la Segunda Guerra Mundial, al 2,1% en 2022, según datos oficiales
Uno de los principales puntos de tensión es el acuerdo que la UE y el Mercosur negocian desde hace más de 20 años y que, según los agricultores, asestaría un duro revés a este sector en Europa.
"Francia no va a aceptar este tratado. Esto es claro, inequívoco y firme", aseguró Attal, pese a que la poderosa patronal gala Medef se dijo favorable al acuerdo con Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay.
Aunque las protestas no figuraban en la agenda de la cumbre en Bruselas, el presidente francés, Emmanuel Macron, abordó "el futuro de la agricultura europea" con la titular de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, según la presidencia.
El gobierno francés multiplicó sus esfuerzos, máxime cuando las protestas se recrudecieron la víspera con la detención de alrededor de un centenar de agricultores por irrumpir en el mercado mayorista de Rungis, clave para la alimentación de París.
A la espera de la reacción de los otros sindicatos que durante dos semanas bloquearon autopistas clave en Francia, las principales centrales ya advirtieron que seguirán vigilantes y que esperan resultados del gobierno de cara al Salón Internacional de la Agricultura, cita anual del sector que abre sus puertas en París el 24 de febrero.
Con información de Télam
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