La Cámara Baja del Parlamento español votó el martes a favor de iniciar los trabajos sobre un proyecto de ley que legalizaría a cientos de miles de inmigrantes indocumentados, basándose en una propuesta de grupos de la sociedad civil que habían recogido más de 600.000 firmas de apoyo.
Los partidos políticos disponen ahora de hasta dos meses para modificar la propuesta y decidir cómo legalizar a los cientos de miles de inmigrantes irregulares que viven en España y realizar una votación final.
La plataforma #RegularizacionYa, integrada por unos 900 grupos de derechos y otras organizaciones no gubernamentales, que respalda la propuesta, calcula que el número de inmigrantes indocumentados en España podría acercarse al medio millón, alrededor de un tercio de ellos menores de edad.
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El experto en migraciones Jesús Fernández Huerta señaló que los recientes cambios en la ley que regula los permisos y visados de trabajo para extranjeros podrían haber reducido esta cifra por debajo de las 300.000 personas.
En un comunicado emitido el fin de semana, la Iglesia católica española pidió a los partidos políticos que apoyaran la propuesta legislativa. El Partido Popular, de la oposición conservadora, respaldó la propuesta tras un cambio de opinión de última hora.
El partido de extrema derecha y antiinmigración Vox fue el único que votó en contra, con 310 votos de los 343 emitidos, apoyando el inicio del proceso legislativo.
España adoptó una medida similar en 2005, cuando un anterior Gobierno socialista concedió una amnistía a unas 800.000 personas indocumentadas.
España contabilizó 21 millones de trabajadores legales en marzo, un máximo histórico en el que hay un gran contingente de inmigrantes legales que suelen percibir salarios más bajos. Datos recientes recopilados por la organización Funcas indican que la proporción de extranjeros residentes en España alcanzó el 18,1%, por encima de la media de la UE de 17,1%.
Con información de Reuters