El jefe de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, advirtió hoy que "no está claro" cuánto puede durar la unidad del bloque luego de que se conociera la decisión de Hungría de impulsar una consulta para sondear la opinión de la población sobre las sanciones europeas a Rusia.
"Putin se ha equivocado al creer que nosotros íbamos a romper nuestra unidad y, cuidado, todavía no está claro cuánto tiempo puede durar porque hay un líder europeo que llama a un referendo a su país para proponer a sus ciudadanos que en diciembre no se renueven las sanciones a Rusia", dijo Borrell en un discurso en la Fundación Carlos de Amberes, en Madrid.
"Haríamos mal en ignorar esta situación", agregó, según la agencia de noticias Europa Press.
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Borrell destacó que la unidad que mantuvo la UE durante la crisis del Covid-19 "hay que seguir manteniéndola" para demostrar que "no es solo una unión regional, no es solo un club de Estados, sino una institución política y comunidad política en la que estados soberanos siguen siendo soberanos".
La hermandad entre los estados miembros hay que seguir manteniéndola para hacer frente "a la crisis energética que se nos viene encima" provocada por la invasión de Ucrania, exhortó el jefe de la diplomacia comunitaria.
A su vez, llamó a Europa para que se "preocupe" por los países del sur y con el resto del mundo.
En relación con los movimientos migratorios, Borrell sostuvo que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, espera una "estampida migratoria" en África.
"Sed conscientes de que Putin espera provocar una estampida migratoria en África. Cuando provoca hambruna en África es porque sabe que la consecuencia del hambre es la migración y que los que van a emigrar lo van a hacer aquí", previó.
En referencia a la crisis energética a la que se enfrenta Europa debido a la guerra, Borrell calificó de "gran error estratégico" el haber puesto la "dependencia" energética de Europa "en manos de un proveedor tan poco fiable como es Putin".
Instó a los países del bloque a buscar otras fuentes gasísticas fiables sin contar con la energía rusa que, apuntó, hasta antes de que comenzara la guerra, parte de la prosperidad europea, "se ha construido en torno a la energía barata y abundante que venía de Rusia y a las grandes oportunidades de comercio que representaba China".
Pidió también "repensar" las relaciones con China "con esta relación que implica ser a la vez socios, rivales y competidores".
Con información de Télam