El asesinato de George Floyd a manos de la policía despertó una serie de protestas en todo el país que duró varios días y, a partir de eso, Donald Trump sostuvo que lanzará parte del ejército a la calle para "frenar la violencia". "Vamos a acabar ya con los disturbios y la falta de ley", advirtió.
Los anuncios del mandatario no sirvieron de mucho y se teme una nueva jornada de protestas a nivel nacional y que el estallido social se mantenga en las ciudades. Hay decenas de ciudades con toque de queda, incluidas Nueva York, Los Ángeles, Houston y Washington DC.