Presuntos hackers de Corea del Norte intentaron ingresar a las bases de datos de los fabricantes de la vacuna contra el coronavirus de Astrazeneca y la Universidad de Oxford, la tercera en avance de desarrollo a nivel mundial.
De acuerdo a la agencia internacional Reuters, dos fuentes del sector que pidieron no dar sus nombres informaron el ciber ataque y explicaron que los espías buscaron vulnerar el sistema informático mediante ofertas laborales falsas a los empleados.
Se hicieron pasar por reclutadores en el sitio de redes LinkedIn y WhatsApp para acercarse al personal de AstraZeneca con ofertas de trabajo falsas,. Luego enviaron documentos que pretendían ser descripciones de puestos de trabajo que estaban atados con código malicioso diseñado para obtener acceso a la computadora de la víctima.
Los intentos de piratería se dirigieron a un "amplio conjunto de personas", incluido el personal que trabaja en la investigación de COVID-19, dijo una de las fuentes, pero no se cree que hayan tenido éxito. De acuerdo a Reuters los beneficios de hackear a los fabricantes puede ser tres: la información robada podría venderse con fines de lucro, utilizarse para extorsionar a las víctimas o dar a los gobiernos extranjeros una valiosa ventaja estratégica mientras luchan por contener una enfermedad que ha matado a 1,4 millones de personas en todo el mundo.
Astrazenica la vacuna más barata que se producirá en Argentina
El laboratorio británico AstraZeneca y la universidad de Oxford anunciaron que la vacuna contra el coronavirus -que en Argentina el laboratorio mAbxience producirá 150 millones de dosis- mostró "una eficacia del 70%" en promedio en las pruebas, aunque de acuerdo con la cantidad de dosis aplicadas la efectividad es de hasta el 90%, y ya son cuatro las distintas vacunas que demostraron ser eficaces para combatir la pandemia de Covid-19.
En un comunicado publicado en su página web, la Universidad de Oxford afirmó que su vacuna contra el coronavirus mostró "una eficacia del 70%" en promedio en las pruebas, aunque de acuerdo a la cantidad de dosis aplicadas, la efectividad sube hasta el 90%, sin dar mayores explicaciones relacionadas a esta variación porcentual.
"La eficacia y seguridad de esta vacuna confirman que será muy efectiva contra el Covid-19 y que tendrá un impacto inmediato en esta emergencia de salud pública", afirmó el jefe ejecutivo de AstraZeneca, Pascal Soriot, en un comunicado.
La vacuna de Oxford está hecha de una versión debilitada de un virus del resfrío común (adenovirus), modificado genéticamente de manera que es imposible que crezca en los seres humanos. La efectividad se eleva al 90% en el caso de una primera muestra de personas que recibieron media dosis y luego una dosis completa un mes después, mientras que la eficacia baja al 62% en otro grupo que recibió dos dosis en total con un mes de diferencia.
AstraZeneca estimó en el comunicado que su vacuna es "altamente eficaz" para prevenir la enfermedad, y remarcó que durante las pruebas ningún participante desarrolló formas graves de coronavirus ni tuvo que ser hospitalizado. La vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca será producida en Argentina por el laboratorio mAbxience, cuyo anuncio lo realizó el presidente Alberto Fernández en agosto y destacó que el acuerdo permitirá que el país pueda tener prioridad a la hora de acceder a las dosis.
El empresario argentino Hugo Sigman, titular de mAbxience, anunció a principios de noviembre que ya recibió un pedido para producir en el país al menos 150 millones de dosis de la vacuna contra el coronavirus desarrollada por la Universidad de Oxford, y que su valor rondará los 4 dólares. En su cuenta de Twitter, Sigman informó que su laboratorio paralizó su producción habitual de medicamentos para dedicarse por completo a la de la vacuna que está desarrollando Oxford y AstraZeneca, y ya se encargó la fabricación de "un mínimo de 150 millones de dosis y un máximo de 250 millones", siempre que la vacuna "sea aprobada por las agencias regulatorias correspondientes, incluida la Anmat".