Francia anunció hoy que permitirá el desembarco del navío "Ocean Viking" que transporta a más de 200 migrantes rescatados en el mar Mediterráneo y criticó a Italia por haber negado el acceso de la embarcación a sus costas.
El ministro de Interior francés, Gerald Darmanin, dijo que se permitirá el desembarco del "Ocean Viking" en el puerto militar de Toulon, en el sur, después de un pulso con Italia sobre quién debía recibir a los migrantes, informó la agencia de noticias AFP.
El ministro criticó el "comportamiento inaceptable" de las autoridades italianas y dijo que está previsto que el navío atraque mañana.
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Francia e Italia están enfrentadas por la negativa de Roma de permitir el desembarco de barcos de organizaciones humanitarias que rescatan a migrantes en el mar.
Darmanin advirtió que es "obvio que habrá consecuencias extremadamente severas para las relaciones bilaterales" con Italia y poco después se anunció la suspensión "inmediata" de la acogida en su territorio de 3.500 refugiados que están en Italia y que irían a Francia en función de la cuota de reparto acordada por la Unión Europea (UE).
Las autoridades italianas afirman que otras naciones de la UE deben asumir más la carga de acoger a los miles de migrantes que intentan llegar a Europa desde el norte de África.
Italia es uno de los países que más migrantes recibe por tener sus costas más próximas a las de Libia, en el norte de África, uno de los países de los que más salen las barcas cargadas con personas que huyen de sus países por la guerra, los regímenes autoritarios o la pobreza.
Más temprano Francia había anunciado que iba a evacuar a tres migrantes del "Ocean Viking" que necesitan atención médica urgente, además de un acompañante.
Pero más tarde, la ONG SOS Mediterrane, que opera el barco, solicitó las evacuaciones debido a la negativa de Italia a ofrecer acceso al puerto.
Tras el anuncio de Darmanin, SOS Mediterranée afirmó que siente un "alivio teñido de amargura".
El ministro francés recalcó que la decisión de permitir el desembarco del navío es "excepcional" y se debe a que los pasajeros esperaron 15 días una autorización de las autoridades italianas para entrar en puerto.
Con información de Télam
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