Un fiscal independiente, que hasta no hace mucho era fiscal del tribunal de La Haya a cargo de investigar crímenes de guerra en Kosovo, tendrá la tarea de supervisar las pesquisas penales sobre el expresidente estadounidense Donald Trump, que, en principio, ya denunció la politización del proceso.
El anuncio del Departamento de Justicia sobre el nombramiento de un fiscal independiente se da apenas tres días después de que el expresidente anunciara que buscará volver a la Casa Blanca en 2024.
La designación es una señal de una prolongada batalla legal, en la que Trump probablemente alegará que está la mira de Joe Biden para evitar que vuelva a ganar la presidencia.
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El fiscal general Merrick Garland anunció ante la prensa el nombramiento de Jack Smith, hasta hace poco fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) para el caso Kosovo.
En un comunicado, Smith prometió actuar en forma "rápida y minuciosa" y de manera "independiente" y ajustada "a la ley y a los hechos".
Pero Trump puso reparos de inmediato a la designación, a la que consideró “política" e "injusta".
"He pasado por esto durante seis años", dijo el magnate a la cadena Fox News Digital y añadió: "Es inaceptable. Es tan injusta. Es tan política".
Para Trump, se trata de “la peor politización de la justicia" en el país. “Es injusto para el país, para el Partido Republicano, y no creo que la gente deba aceptarlo. No lo voy a aceptar", insistió.
Garland dijo que nombrar un fiscal independiente era de "interés público", atento a que el republicano Trump y el demócrata Biden ya adelantaron sus intenciones de presentarse en 2024.
"En base a los últimos hechos, incluido el anuncio del expresidente de que es candidato a la presidencia y la intención declarada del presidente en funciones de ser también candidato, llegué a la conclusión de que es de interés público nombrar un abogado especial", explicó Garland, según la agencia de noticias AFP.
Trump es investigado por guardar documentos gubernamentales que fueron descubiertos en un allanamiento del FBI a su mansión de Florida y por su implicación en el asalto de 2021 al Capitolio de Estados Unidos por parte de un grupo de seguidores que pretendía frenar el acto de oficialización de los resultados de las elecciones de 2020.
El fiscal especial determinará si Trump -que se declara víctima de una persecución política- debe enfrentar cargos por esas dos investigaciones.
Que sea precandidato a la presidencia complica la chance de procesarlo.
El fiscal independiente podría ayudar a aislar a Garland de las acusaciones de que las investigaciones tienen motivaciones políticas.
Además, reportará a Garland, quien tendrá la última palabra sobre si deben presentarse cargos contra el expresidente.
Aun si fuese acusado, Trump puede ser candidato porque ninguna ley estadounidense inhabilita la postulación de un procesado.
Durante su mandato, Trump fue investigado por el fiscal especial Robert Mueller por obstrucción a la justicia y posible colusión electoral con Rusia, pero no se presentaron cargos en su contra.
La inusualmente temprana postulación de Trump a las elecciones del 2024 fue vista por algunos analistas como una vía para evitar eventuales cargos penales.
De 76 años, Trump fue acusado en 2019 por la Cámara de Representantes por tratar de ensuciar a Biden en la campaña electoral y luego por haber instigado el asalto al Capitolio en 2021, pero en los dos juicios de destitución fue absuelto por el Senado.
Con información de Télam
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