Un policía resultó herido luego de la explosión registrada este sábado por la mañana en Francia. Según las autoridades, dos autos fueron detonados frente a una sinagoga en el sur del país; un hecho que fue calificado por el propio presidente francés, Emmanuel Macron, como "un acto terrorista", por el que aún no hay detenidos. "Se está haciendo todo lo posible para encontrar al autor de este acto terrorista y proteger los lugares de culto. La lucha contra el antisemitismo es una lucha constante, la de una nación unida", indicó el mandatario en su cuenta de la red social X.
Los dos vehículos fueron incendiados tras explotar una bomba de gas en uno de ellos frente a la sinagoga Beth-Yacoov, ubicada en la localidad de La Grande-Motte, entre las 8 y las 8.30 de la mañana (horario francés), según un parte de la Fiscalía Nacional Antiterrorista (PNAT). Si bien fue herido por la explosión un agente policial, las cinco personas que se encontraban en la sinagoga -incluido un rabino- resultaron ilesas, detallaron. "Pensamientos para los fieles de la sinagoga Grande-Motte y para todos los judíos de nuestro país", agregó el máximo mandatario en su mensaje.
Las cámaras de vigilancia de la sinagoga detectaron un hombre que llevaba una bandera de Palestina tras la explosión y el incendio de la sinagoga, según informó la agencia de noticias AFP. "La cámara de videovigilancia muestra, según otra fuente cercana al caso, a este hombre con botellas vacías en las manos y su cintura rodeada por una bandera palestina", agregó el medio local Le Monde.
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Además de Macron, el primer ministro, Gabriel Attal, escribió en la red social X que "las fuerzas de seguridad están rastreando al sospechoso" y ordenó "el refuerzo inmediato de la protección de los lugares de culto judío". Por su parte, el expresidente francés Francois Hollande consideró que "cuando se ataca una sinagoga, el objetivo es toda Francia" y remarcó que "el antisemitismo debe ser denunciado y combativo de forma unánime".
La Fiscalía especializada PNAT tomó conocimiento de los hechos pasadas las 11 (horario de Francia) y abrió una investigación por “tentativas de asesinato en relación con una empresa terrorista”, “destrucciones por medios peligrosos en relación con una empresa terrorista” y “asociación delictiva terrorista con el fin de preparar delitos de ataques contra las personas”.
La causa, que generó el repudio de la mayor parte del arco político francés, tiene los cargos de intento de asesinato, destrucción con medios peligrosos y asociación de malhechores, todos con motivaciones terroristas.