Médicos residentes de toda Inglaterra iniciaron hoy una huelga de cuatro días exigiendo un aumento salarial del 35% y una mayor seguridad en la atención de los pacientes.
El sindicato Asociación Médica Británica (BMA) solicitó una "restauración salarial" debido a los 15 años de aumentos por debajo de la inflación que han tenido los médicos jóvenes.
Sin embargo, el ministro de Salud, Steve Barclay, dijo que tal aumento salarial no es razonable y pidió a los médicos que reconsideren su posición y regresen a trabajar para evitar la interrupción en la atención médica a los pacientes.
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Los médicos jóvenes respondieron que estaban decididos a continuar con la huelga hasta que se cumplan sus demandas.
Se espera que se cancelen más de 250.000 turnos y operaciones y que se vea afectada hasta la mitad de los tratamientos planificados.
Los médicos residentes ya habían organizado una huelga del 13 al 15 de marzo, que resultó en la reprogramación de 175.000 consultas ambulatorias.
El sindicato expresó su deseo de resolver la disputa lo antes posible, pero aseguró que la falta de acción por parte del Gobierno del primer ministro Rishi Sunak llevó a la huelga actual.
La asociación de médicos residentes manifestó además que la falta de apoyo y el agotamiento de los médicos estaban dañando su capacidad para brindar atención segura y efectiva a los pacientes.
La huelga ha sido criticada por algunos pacientes, quienes temen que la interrupción en la atención médica pueda poner en peligro su salud.
Funcionarios de salud aseguraron que están trabajando para minimizar el impacto en los pacientes y pidieron a aquellos con citas programadas durante la huelga que se comunican con sus médicos para obtener más información.
La huelga está provocando una "interrupción sin precedentes", según el director médico del Sistema de Salud Público (NHS) de Inglaterra, el profesor Stephen Powis.
La huelga de los médicos residentes es un reflejo de las tensiones que existen en el sistema de salud de Inglaterra, que ha estado bajo presión debido a la pandemia de Covid-19.
Los médicos residentes sufrieron un recorte de más del 25% en sus salarios desde 2008, aseguró el sindicato BMA.
Explicó que la falta de inversión en salarios por parte del gobierno dificultó la contratación y retención de médicos residentes.
Esto ejerce más presión sobre el NHS y hace que sea más difícil brindar atención a los estándares esperados por los profesionales.
Con información de Télam