La migración neta en el Reino Unido alcanzó un récord de 606.000 en el año hasta diciembre de 2022, superando el máximo anterior de la posguerra de 504.000 hasta junio del año pasado, según datos de la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS) británica.
A pesar de las promesas del gobernante Partido Conservador en 2019 de reducir las cifras generales de inmigración, las estadísticas muestran que la inmigración neta, que refleja el número de personas que llegan y salen del Reino Unido, aumentó de manera significativa.
El informe de la ONS también mostró que la inmigración total a largo plazo se estimó en alrededor de 1.2 millones en 2022, mientras que la emigración fue de 557.000.
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La mayor parte de la inmigración fue de ciudadanos no pertenecientes a la Unión Europea (UE), de la que el Reino Unido se retiró en 2020, con 925.000 llegadas, seguidas de ciudadanos de la UE, con 151.000, y de ciudadanos británicos, con 88.000.
Sin embargo, la ONS también señaló que, a pesar del aumento de la inmigración en 2022, sus estimaciones de migración internacional a largo plazo sugieren una desaceleración del crecimiento en los trimestres más recientes.
"Esto puede reflejar la naturaleza temporal de estos eventos mundiales, además de comenzar a ver emigrar un mayor número de estudiantes internacionales. Continuaremos monitoreando estos patrones en los próximos meses", dijo el primer ministro Rishi Sunak.
Se estima que el aumento de la migración fue influido por varios eventos mundiales, como la guerra en Ucrania y los disturbios en Hong Kong por las protestas contra el Gobierno de China, indicó el organismo.
La ONS estimó que hubo 114.000 llegadas a largo plazo desde Ucrania y 52.000 personas desde Hong Kong en el Reino Unido en 2022.
El exministro del gabinete Robert Buckland en respuesta a las nuevas cifras, dijo que se necesita un "debate más mesurado y tranquilo" sobre la inmigración.
La ministra del Interior, Suella Braverman, está adoptando una postura más dura, generando tensiones dentro del Gabinete.
Jay Lindop, director del centro para la inmigración internacional de la ONS, señaló que los principales impulsores de ese aumento fueron las personas que llegaron al Reino Unido desde países no pertenecientes a la UE por trabajo, estudio y con fines humanitarios, incluyendo a los que llegaron desde Ucrania y Hong Kong.
Sin embargo, las nuevas estadísticas están provocando el enojo de los conservadores que quieren ver reducida la inmigración.
En ese sentido, el primer ministro Sunak está bajo presión después de parecer retractarse de la promesa de su predecesor conservador, Boris Johnson, de reducir la inmigración neta a menos de 250.000.
El líder del opositor Partido Laborista, Keir Starmer por su parte, acusó a los conservadores de "romper promesas" para reducir los números.
Sin embargo, Sunak replicó que a Starmer le gustaría ver a "aún más personas" viniendo al Reino Unido.
A pesar del aumento récord de la inmigración en el Reino Unido, la escasez de mano de obra persiste en ciertos sectores.
Esta carencia es especialmente notable en la agricultura, donde la falta de trabajadores ha llevado a pérdidas significativas en las cosechas.
Aunque las cifras de inmigración son elevadas, la distribución de estos inmigrantes en diferentes sectores de la economía no siempre se alinea con las necesidades del mercado laboral.
Los empresarios y agricultores del Reino Unido están pidiendo mayor flexibilización en las políticas de inmigración para poder contratar más mano de obra extranjera.
Con información de Télam
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