La barcaza bautizada como Bibby Estocolmo, una nave que el Gobierno británico tiene previsto utilizar para alojar a solicitantes de asilo que llegan al Reino Unido, fue considerada como una "posible trampa mortal" por el Sindicato de Brigadas de Bomberos (FBU).
"Como la única voz profesional, los bomberos creen que Bibby Stockholm es una posible trampa mortal", declaró el secretario general adjunto de la FBU, Ben Selby, quien anunció que planea escribir al Ministerio del Interior sobre preocupaciones de hacinamiento y acceso a las salidas de emergencia en el barco, según consignó el diario The Guardian.
El Gobierno estima alojar temporalmente hasta 500 personas allí con el objetivo de ahorrar el costo en hoteles mientras se procesan las solicitudes de asilo, sobre todo de las personas que cruzan el Canal de la Mancha en embarcaciones precarias, un proyecto que fue criticado por promover el hacinamiento y la precariedad.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
El año pasado cruzaron más de 45.000 personas y en lo que va de este año, la cifra superó las 10.000 y se espera que durante el verano aumenten los cruces.
El Gobierno tiene una lista de miles de personas que aún esperan por sus solicitudes.
La embarcación, que debería haber comenzado a recibir a los primeros solicitantes de asilo esta semana, enfrentó un nuevo retraso debido a problemas de seguridad en el barco que está amarrado en la isla de Portland.
Las declaraciones de los bomberos se suman a una serie de preocupaciones y controversias que rodean el uso de esa barcaza con críticas continuas de políticos locales, organizaciones de derechos humanos y ahora de los propios bomberos.
Más de 50 organizaciones, incluidos Refugee Council, Asylum Matters y Refugee Action, calificaron el plan del Gobierno de "cruel e inhumano".
Una fuente del Ministerio del Interior explicó que la demora se debe a que las prácticas laborales para los trabajadores portuarios deben ser aprobadas por el Ejecutivo de Salud y Seguridad.
"No hay problemas de seguridad contra incendios", dijo la fuente, aunque esto fue descartado por la FBU.
La alcaldesa de Portland, Carralyn Parkes, por su parte, no se mostró sorprendida por el retraso y subrayó que el Ministerio del Interior "fue inconsistente y poco transparente en su toma de decisiones".
Consideró que el intento de apresurar el uso de la barcaza sin la debida consulta y consideración iba a crear problemas.
Una fuente de preocupación es el diseño de la barcaza, que cuenta con 222 camarotes a lo largo de estrechos pasillos en tres cubiertas, con solo dos salidas principales.
Una declaración del Servicio de Bomberos de Dorset & Wiltshire subrayó que es responsabilidad del Ministerio del Interior y del operador de la embarcación completar una evaluación de riesgo de incendio y garantizar que se implementen las medidas de seguridad necesarias.
Ante la ola de críticas, un portavoz de la cartera del Interior declaró que la embarcación estaba en los "últimos preparativos" para asegurar su cumplimiento, enfatizando la intención del Gobierno de reducir el uso de hoteles costosos y ofrecer alojamiento más manejable.
En tanto, el secretario de Empresa, Energía y Estrategia Industrial, Grant Shapps, negó que la barcaza "no fuera absolutamente segura".
"Ciertamente no será una trampa mortal", dijo a los periodistas.
"Este barco fue utilizado anteriormente por Alemania para albergar inmigrantes, no hay razón por la que no sea absolutamente seguro", insistió.
El primer ministro Rishi Sunak, por su parte, defendió el plan de la barcaza y rechazó la sugerencia de que era un "desorden".
Es la primera vez que se utiliza una embarcación para alojar a solicitantes de asilo en viviendas a largo plazo.
Además de la barcaza, el Gobierno estuvo explorando la opción de utilizar bases militares en desuso y carpas para albergar a los solicitantes de asilo.
Por otro lado, el Reino Unido aprobó una ley reciente, que tiene como objetivo limitar las solicitudes de asilo y aumentar las deportaciones.
También intentó deportar inmigrantes a Ruanda a través de un acuerdo con ese país. Aunque legal, la estrategia fue anulada por el Tribunal de Apelaciones y está en proceso de apelación ante la Corte Suprema.
La ONU expresó su profunda preocupación por el proyecto de Ley de Migración Ilegal aprobado en el Reino Unido, destacando que está en desacuerdo con las obligaciones internacionales en derechos humanos y refugiados.
En particular, afectará a niños no acompañados y separados, quienes pueden haber sufrido violaciones de derechos humanos, incluyendo la trata de personas.
Con información de Télam