Ambientalistas de la organización Just Stop Oil paralizaron hoy en Londres el tránsito de la autopista M25, con colas del tránsito que se extienden a lo largo de ocho kilómetros por segundo día consecutivo, como parte de su campaña para exigir que el Gobierno detenga todas las nuevas licencias y autorizaciones para la explotación de petróleo y gas.
Las protestas, que se realizaron en distintos lugares de la capital británica, coinciden con la cumbre de Cambio Climático COP27, que se está celebrado en Egipto.
Just Stop Oil es una coalición de grupos que trabajan juntos para exigir que el Gobierno detenga de inmediato todas las licencias y permisos futuros para la exploración, el desarrollo y la producción de combustibles fósiles en el Reino Unido.
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La policía de los condados de Essex y de Surrey informaron a los medios británicos que debieron responder a distintas protestas donde los manifestantes interrumpieron el tránsito y bloquearon entradas en túneles en la misma autopista.
La activista Charlotte Kirin, de 53 años, trabajadora social, dijo que para sobrevivir se deben tomar medidas para detener la extracción de petróleo y gas.
"Mientras el Gobierno pretenda que esta no es la prioridad, haré lo que pueda para exigir una respuesta. La historia nos muestra que tenemos que desafiar las leyes injustas. Lo que se le está haciendo a la gente de todo el mundo en nombre del beneficio es la mayor injusticia imaginable. No le daré la espalda a las personas cuyas vidas están siendo destruidas para el beneficio de los hombres ricos", afirmó en un comunicado de la organización.
También, Edred Whittingham, de 25 años, un estudiante de Cambridge dijo que la política del país está rota y depende de la gente común arreglarla.
"Vivimos en una época en la que millones de personas literalmente pasan hambre o mueren de frío en sus hogares, mientras que las empresas de combustibles fósiles obtienen beneficios récord".
"Podemos cambiar esto, pero tenemos que resistir. El cambio climático destruirá el sistema alimentario mundial y desplazará a cientos de millones de personas de sus hogares, lo que provocará hambrunas, guerras y disturbios sociales. Que nuestro gobierno siga aprobando nuevos proyectos de combustibles fósiles es un acto de genocidio", insistió.
A su vez, Molly Berry, de 70 años, jubilada de Hertfordshire, agregó que "la crisis climática no es de derecha o de izquierda, no es una opinión ni un punto de vista ni una causa. Es real, y está sucediendo ahora, y está muy cerca de destruir absolutamente todo lo que amamos".
"Cuando mis amigos me muestran fotografías de sus nietos, me rompe el corazón pensar en lo que enfrentarán en sus vidas. Es por eso que estoy dispuesta a arriesgar mi libertad para exigir que el gobierno detenga todo nuevo petróleo y gas".
Mientras tanto, la policía ya concretó más de 700 arrestos, incluidos 25 ayer. Desde que comenzó la campaña el 1 de abril, los activistas de Just Stop Oil han sido arrestados más de 2.000 veces, con cinco de ellos actualmente en prisión.
Con información de Télam
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