Perú a balotaje: el sorpresivo candidato que competirá por la presidencia

De acuerdo con el sondeo a boca de urna, el sindicalista Pedro Castillo tenía 16,1% de los votos, seguido por el economista liberal Hernando de Soto y la populista de derecha Keiko Fujimori, empatados con 11,9%.

12 de abril, 2021 | 08.28

El sindicalista de izquierda Pedro Castillo quedó como el candidato mejor posicionado para pasar a la segunda vuelta por la Presidencia de Perú, según una encuesta a boca de urna difundida minutos después del cierre de las singularmente reñidas elecciones generales de ete domingo último.

Mientras tanto, no cedía la expectación por conocer los resultados de los conteos rápidos de firmas privadas de opinión pública, cuya difusión estaba prevista para después de las 21 (las 23 en la Argentina), y los primeros cómputos oficiales, esperados para las 23.30 (la 1.30 de mañana en la Argentina).

De acuerdo con el sondeo a boca de urna de la empresa Ipsos, Castillo tenía 16,1% de los votos, seguido por el economista liberal Hernando de Soto y la populista de derecha Keiko Fujimori, empatados con 11,9%.

Asimismo, también tenían chances de entrar al balotaje el legislador centrista Yonhy Lescano, que recogía 11,0%, y el empresario de derecha Rafael López Aliaga, con 10,5%, según divulgaron Panamericana TV, la radio RPP y los diarios El Comercio y La República. Más atrás aparecían la ex legisladora de izquierda Verónika Mendoza, con 8,8%, y el exfutbolista de centroderecha George Forsyth, con 6,4%.

El sondeo confirmó la paridad registrada entre esos siete candidatos, de los cuales Castillo aparecía sexto en dos encuestas y séptimo en otra a una semana de los comicios.

Sin embargo, una simulación de voto realizada por Ipsos ayer, cuando ya regía la veda electoral que impedía difundirla, y a la que tuvo acceso Télam, lo reveló en primer término, seguido por De Soto.

“El pueblo es sabio, se identifica con quien nació del pueblo; lo primero que tengo que hacer si se confirma este resultado es agradecer a cada uno de los maestros y al pueblo en general”, afirmó esta noche Castillo en Tacabamba.

Castillo protagonizó un episodio risueño en esa ciudad de la provincia de Chota, en el departamento norteño Cajamarca, cuando fue a votar montando una yegua que se puso nerviosa y corcoveó ante la aglomeración de personas.

Los peruanos votaron para elegir presidente y renovar el Congreso en los comicios más abiertos de su historia, con 18 candidatos que no lograron capitalizar el gran descontento social en este país arrasado por el coronavirus.

Las elecciones coincidieron con un momento tan particularmente brutal de la pandemia, que las largas filas para votar se confundían en barrios de Lima con aquellas para conseguir oxígeno para familiares enfermos de coronavirus.

Solo cerca de mediodía, cinco horas después de que se abrieran las urnas, la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) informó que se había constituido 98% de las mesas, luego de que se verificara la ausencia de numerosas autoridades de mesa y el presidente Francisco Sagasti llamara a “los jóvenes” a asumir voluntariamente esa función.

Además de presidente y dos vicepresidentes -entre 18 fórmulas, el segundo mayor número en la historia de Perú, solo superado en 2006-, se elegían hoy los 130 miembros del Congreso unicameral y cinco diputados al Parlamento Andino.

La dispersión en las preferencias electorales se verificaba también en el campo parlamentario, en el que hasta 12 partidos tenían posibilidades de ganar bancas -ninguno, más de 30-, según la encuesta a boca de urna, lo que, de ocurrir, dejará un panorama similar al actual, con 11 partidos y cuatro legisladores independientes.

Elecciones en Perú, en medio de una gran crisis política

Perú llegó a estos comicios en medio de una prolongada crisis política que consumió cuatro presidentes y dos Congresos en el actual quinquenio de Gobierno, agravada por el coronavirus y su impacto.

Uno de esos expresidentes, Martín Vizcarra -quien se postuló al Congreso- no pudo votar en Moquegua, donde está empadronado, porque la justicia no le permitió salir de Lima debido a la investigación que está llevando adelante por su vacunación irregular contra el coronavirus.

La Comisión Permanente del Congreso aprobó un informe de la Subcomisión de Asuntos Constitucionales que propone inhabilitar por 10 años a Vizcarra para ejercer cargos públicos.

Otra prueba de esa crisis es que un legislador opositor presentó una moción de censura a Sagasti -porque la excanciller Elizabeth Astete dijo que el mandatario estaba al tanto de su vacunación irregular-, que el ministro del Interior, José Elice, dijo que “no tiene sustento”.

Por otra parte, la economía de Perú sufrió en 2020 una de las mayores contracciones en todo el mundo y la primera en el país en más de dos décadas.

En ese contexto, las encuestas reflejaron un alto desinterés electoral ciudadano, por lo que también había expectación por conocer los porcentajes de inasistencia y de votos blancos y nulos, que se anticipaban más altos que los de costumbre.