El presidente de Perú, Pedro Castillo, desde el comienzo de su mandato enfrenta embates por parte de la oposición -en su mayoría fujimorista y de derecha- en un país en donde la institucionalidad está en jaque de manera casi permanente. Entrada la noche del jueves, el Congreso aprobó por 73 votos a favor (52 se necesitaban), 32 en contra y seis abstenciones. En este contexto, la misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) dio a conocer un informe en el que recomendó que el Gobierno y la oposición mantengan una “tregua política” mientras organizan un “diálogo” para superar la crisis.
“Se recomienda una tregua en tanto se convoca y conforma el diálogo”, afirmó el jefe de esa misión, el excanciller paraguayo Eladio Loizaga, en conferencia de prensa en la sede de la OEA, en Washington, tras entregar el informe del grupo al Consejo Permanente del organismo. El documento fue elaborado en función de la visita que llevaron a cabo entre el 16 y el 22 de noviembre. La misión llegó al país a pedido de Castillo con el fin de contribuir a solucionar el conflicto de poderes que vive el país en los últimos años y que condiciona su período de gobierno desde que comenzó, el 28 de julio de 2021.
Loizaga precisó que debería realizarse una convocatoria “a una instancia de diálogo formal entre Presidencia, legislativos, altas cortes, representantes de partidos políticos y miembros de la sociedad civil”, para conversar “libre de condicionamientos”. Según consideró, las negociaciones podrían ser asistidas por un tercero para “facilitar o acompañar”, además podría contar con la observación en instancias pertinentes de organizaciones internacionales. El funcionario, también, solicitó el “compromiso de los actores políticos para alcanzar un clima de tranquilidad y la conducción de procesos judiciales que deben seguir su curso en los plazos de ley”, según se pudo ver en la conferencia de prensa transmitida.
En un comunicado emitido el 22 de noviembre, al finalizar la misión, la OEA informó que durante aquellos días mantuvieron encuentros con integrantes de los distintos poderes del Estado, funcionarios de alto nivel, magistrados, representantes de los 13 grupos parlamentarios del Congreso y los diputados no agrupados; autoridades electorales; la Defensoría del Pueblo; la Conferencia Episcopal peruana; organizaciones profesionales de abogados, periodistas; centrales sindicales; y organizaciones de la sociedad civil. Además, el Grupo recibió por escrito otros puntos de vista sobre la situación en el país, que serán procesados igualmente en la preparación del informe.
Allí, también manifestaron expresamente su solidaridad y respaldo al “Gobierno democráticamente electo”, así como a la preservación de la institucionalidad democrática.
Horas después, Castillo efectuó "un llamado a los titulares de las instituciones del Estado y a los líderes políticos y sociales del país para dialogar y asegurar la gobernabilidad".
Lo hizo a través de una serie de mensajes en Twitter, en los que dio por hecho que la misión de la OEA "ha ratificado" que su gobierno "viene recibiendo ataques desestabilizadores por un grupo político que hasta hoy desconoce el voto popular y pretende vulnerarlo". Castillo fundó su exhortación al diálogo en "el espíritu" con que inició su mandato "y que está expresado en las recomendaciones de la OEA".
Reclamó también "rechazar la desestabilización, venga de donde venga", y subrayó que "es momento de dar una solución rápida a las necesidades" del pueblo peruano, "postergadas por muchos años".
"Ratifico que, a pesar de todo, seguiré trabajando por la vigencia del estado constitucional de derecho, el equilibrio de poderes, la democracia fundada en la voluntad popular y por un país próspero que respeta a los poderes del Estado", remarcó el presidente.
La misión de la OEA, que integraron varios cancilleres y vicecancilleres de países de la región -entre ellos, el vicecanciller argentino, Pablo Tettamanti-, pidió -en la voz de Loizaga- que se preserve el respeto a todas las personas y sugirió que la prensa ejerza un papel con sentido colectivo, imparcial y de respeto a todos los actores. “La falta de objetividad no constituye una justificación para alimentar discursos que podrían poner en peligro derechos tan fundamentales para la democracia”, sostuvo el excanciller paraguayo.
Las recomendaciones de la OEA se centraron en cinco puntos clave para que el oficialismo y la oposición trabajen en conjunto: encauzar el diálogo, tregua política, justicia constitucional, racismo y discriminación, derecho de libertad de expresión y los medios de comunicación.
Hasta el momento, el mandatario sorteó dos mociones de vacancia en el Congreso y el próximo miércoles el pleno del Congreso decidirá si se avala su destitución o no. Mientras, están en marcha otros trámites destinados a destituir al mandatario.
López Obrador respaldó el informe de la OEA sobre Perú y defendió a Castillo
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, expresó su apoyo al informe de la OEA que habla de "ataques desestabilizadores" por parte de un grupo político opositor contra su par peruano, Castillo. "Hizo bien el presidente Castillo, recurrió a la OEA, para que la OEA haya opinado que está siendo víctima de una campaña de desprestigio, que está siendo hostilizado, pues ya es bastante claro lo que está sucediendo", dijo el jefe de Estado mexicano, en conferencia de prensa en el Puerto de Veracruz.
El mandatario mexicano aclaró que respeta las decisiones de cada país, pero señaló que "son muchos intentos de desconocerlo como Presidente (…), esperemos que se entienda que él ganó de manera democrática y le ayuda mucho al país mantener la gobernabilidad y estabilidad política", según la agencia de noticias Sputnik.
"En esta ocasión lo están acusando de no estar bien de sus facultades mentales o algo así, de incapacidad moral", expresó AMLO, quien confirmó que viajará a Lima el 14 de diciembre junto sus pares de Chile, Gabriel Boric; y Colombia, Gustavo Petro, para entregarle a Castillo la presidencia pro témpore de la Alianza del Pacífico.
La reunión de mandatarios fue cancelada el mes pasado cuando el Congreso de Perú prohibió al presidente viajar a México, mientras afronta acusaciones de corrupción.
Con información de Télam.
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