Santiago Peña asumió este martes la Presidencia de Paraguay y prometió que el país resurgirá como "un gigante" durante su mandato, al tiempo que, rodeado de gobernantes de América Latina, subrayó que la región está llamada a ser "protagonista" por contar con los recursos que el mundo necesita. Además, se comprometió a "convertir a Paraguay en centro de la integración latinoamericana" frente a los presidentes de Argentina, Alberto Fernández; Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; Uruguay, Luis Lacalle Pou; Bolivia, Luis Arce; y Chile, Gabriel Boric.
Durante su discurso de asunción en Asunción, la capital paraguaya, el ahora joven mandatario se concentró en prometer una vuelta a glorias pasadas. "El éxito es lograr que todos los paraguayos estén mejor y que el mundo sea testigo del resurgir de un gigante", dijo el conservador Peña, de 44 años y economista de formación.
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Paraguay es un importante productor mundial de alimentos, pero sin salida al mar. Su integración en la región y el mundo, principalmente se da a través del Mercosur, bloque comercial que comparte con Argentina, Brasil y Uruguay (y Venezuela, aunque está suspendido actualmente). Uno de los temas sobre los que profundizó en las últimas semanas, antes de la asunción, fue justamente la negociación de un acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea (UE). Luego de proponer que se suspenda el diálogo, este martes, en su discurso, destacó que Paraguay seguirá negociando con Bruselas, pero sin comprometer su "soberanía, territorio valores o cultura", informó la agencia de noticias AFP.
Desde la explanada del Palacio de López, la sede de la Presidencia, también se refirió a los desafíos del escenario mundial, con la guerra en Ucrania, y alertó que la región cuenta con los principales recursos que el mundo reclama. "A nivel internacional tres desafíos globales generan tensiones geopolíticas: acceso al agua, seguridad alimentaria y suficiencia energética. Al ser Paraguay una potencia en esos tres grandes temas, estamos llamados a ser protagonistas en el concierto de las naciones", afirmó. Y sobre el conflicto entre Ucrania y Rusia subrayó que si bien Paraguay mantiene vínculos con Moscú, no puede permanecer indiferente "ante la agresión bélica que sufre el pueblo ucraniano, con consecuencias terribles para el desarrollo humano".
Las principales promesas para los paraguayos
La situación interna de Paraguay estuvo presente también. "A los que me han apoyado, a los que han elegido una opción diferente y a mis contendores ocasionales, les digo que cuento con cada uno de ustedes para contribuir en la construcción de consensos para el bien común", sostuvo el presidente más joven que ha tenido Paraguay en la era democrática. Peña pertenece al derechista Partido Colorado, que ha gobernado el país desde los años cincuenta de manera casi ininterrumpida, con la sola excepción del mandato del izquierdista Fernando Lugo (2008-2012).
Tras agradecer a su jefe político, el ex presidente y actual titular titular del Partido Colorado, Horacio Cartes -un dirigente designado por Estados Unidos como "significativamente corrupto" en medio de la campaña electoral- Peña se comprometió a generar medio millón de empleos y modernizar el sistema educativo durante su mandato. Llamó a "impulsar los cambios que permitirán entregar una educación de calidad y a dejar de hacer remiendos en infraestructuras obsoletas”, y advirtió sobre la importación, sin modificaciones de modelos extranjeros: "Implementar nuestros propios proyectos de soluciones educativas y no para experimentar con ideas foráneas o enlatadas que solo distraen esfuerzos", luego que el Congreso derogara un convenio de ayuda financiera de la Unión Europea para implementar programas que incluyen "enfoque de género".
También habló de la Salud, pero no propuso iniciativas concretas, solo "hacer las cosas bien". “Una sala de terapia intensiva puede salvar vidas, pero también puede ser el negociado de un mal gobierno y la causa de desatención de las verdaderas necesidades de la gente por el mal uso de los recursos”, sentenció.
El vínculo con Taiwán, una excepción en la región
En el acto de asunción estuvo presente el vicepresidente de Taiwán, William Lai, favorito a ganar las elecciones presidenciales del año próximo. Su presencia recordó a los mandatarios de la región que Paraguay es el único país sudamericano que mantiene lazos diplomáticos con Taiwán y no con China, que considera que la isla de Gobierno autónomo es parte de su territorio.
Pese a que China se ha convertido en un socio comercial y hasta financiero crucial de muchos de sus vecinos. El Estado paraguayo mantiene una relación muy cercana con la isla asiática. A mediados de julio, Peña visitó Taiwán como señal de la importancia que tendrá ese vínculo durante su mandato.
Con información de Télam
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