El coronavirus sigue impactando fuertemente en Argentina, donde aumentan los casos día a día y también en el resto del mundo. Hasta ahora, Brasil es el país más complicado en Sudamérica tanto a nivel casos como también en relación a los fallecidos y en las últimas dos semanas ingresó en un aceleramiento sin precedentes con casos de infecciones y de muertes diarias en continua expansión y que superan las cifras del peor momento de la crisis sanitaria del año pasado. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) Brasil actualmente es considerado como el epicentro global de la pandemia.
Desde el inicio de la pandemia al presente, se reportaron en Brasil 11.998.233 casos de infectados de Coronavirus, 294.042 de muertos y 10.419.393 de recuperados y este domingo se reportaron 169.639 nuevos casos, 5.253 de fallecidos y 46.255 de recuperados. Una de las medidas a tomarse en el futuro cercano, sería la anticipación de las "vacaciones" de cara al Domingo de Pascua en el estado de Río de Janeiro en un momento en el que el país enfrenta la peor fase de la crisis de salud.
En el país vecino, las medidas restrictivas pasaron de nulas a insuficientes mientras esperan la llegada de vacunas a través del programa Covax. Si bien Río de Janeiro tuvo este domingo su segundo día de playas cerradas, según GloboNews, incorporarían una nueva medida la semana próxima: la anticipación de las vacaciones y la creación de tres "días libres" ya que fueron uno de los puntos de consenso en las reuniones de la Asamblea Legislativa durante el sábado a la noche y el domingo a la mañana. El "Superferiado" consistiría en 10 días desde el viernes 26 de marzo hasta el domingo de Pascua, el 4 de abril, para combatir en cierta medida la pandemia en una de las ciudades más afectadas por el virus.
De todos modos, la medida no implicaría el cierre de comercios, bares o restaurantes sino horarios específicos y límites en la capacidad de los locales para evitar la circulación masiva de personas. El transporte funcionaría de lunes a sábado desde las cinco de la mañana hasta la medianoche y los domingos desde las 7 de la mañana hasta las once de la noche.
Colapso sanitario en Brasil
Como si estas noticias no fuesen suficientes, el colapso sanitario es total en casi todos los estados de Brasil. "El acceso a unidades de terapia intensiva es virtualmente imposible en todo el país", alertan los médicos del país y más allá de esto, junto al reconocimiento desde Salud sobre encontrarse en el peor momento de la pandemia de COVID-19, no piensan realizar un "lockdown" a nivel nacional para evitar la circulación.
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Mientras los casos crecen y se acercan a los 170 mil contagios y a los 295 mil decesos, el derrumbe atraviesa a todo el territorio: en 25 de 27 capitales estaduales, la capacidad de unidades de cuidados críticos está por encima del 80% mientras que en 19 de ellas, el número ya supera el 90%. En las grandes ciudades, como San Pablo y Río de Janeiro, varias personas fallecieron esperando una habitación de cuidados intensivos; incluso, en el piso de alguna institución sanitaria.
La cepa de Manaos y su alta velocidad de transmisión es la principal razón de lo que ocurre en el país vecino, siendo dos veces y media más infecciosa que la original. Mientras la preocupación crece en toda la región, Bolsonaro ignora las medidas, restricciones y hasta se muestra en contra de la utilización de barbijo. A su vez, algunos estados que se encuentran en la frontera con Argentina y Uruguay, como Río Grande Do Sul, ya llegaron al 100% de camas ocupadas. Por el momento, si bien bajó el porcentaje de vuelos al exterior, no se cierran las fronteras en el país.