La Organización de las Naciones Unidas pidió hoy una investigación "rápida" e "independiente" sobre los recientes enfrentamientos tribales en el oeste de Sudán en los que murieron al menos 213 personas.
La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió en un comunicado a las autoridades sudanesas investigaciones "rápidas, completas, imparciales e independientes sobre estos ataques, y que exijan una rendición de cuentas a todos los responsables", informó la agencia de noticias AFP.
Khamis Abdalla Abkar, gobernador de la provincia de Darfur Occidental, en el oeste del país africano, dijo que los atacantes superaron a una fuerza de seguridad conjunta en la localidad, que se vio forzada a replegarse.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Es un crimen, un crimen contra la humanidad, dijo Abkar en un video y añadió que el pueblo quedó destruido, incluyendo sus instituciones gubernamentales.
Los combates, algunos de los más intensos en la región en los últimos años, se derivaron de la muerte de dos pastores árabes el jueves a las afueras de Kreinik , 80 kilómetros al este de Genena, la capital de Darfur Occidental.
En represalia, grandes números de milicianos árabes, conocidos como yanyauid, irrumpieron en la localidad en las primeras horas del domingo con armas pesadas.
La violencia eventualmente alcanzó la capital provincial el domingo, donde el hospital principal de Genena fue atacado.
Se registró un tiroteo al interior de las instalaciones, incluyendo la unidad de emergencias. Un empleado murió y los trabajadores de salud fueron evacuados, de acuerdo con lo informado por la organización Médicos Sin Fronteras.
Abkar dijo además que los choques del jueves y viernes dejaron ocho muertos y más de una veintena de heridos.
Las tensiones entre las comunidades de las etnias árabes y masalit en Kreinik se remontan a diciembre, cuando una disputa sobre propiedad en un mercado local desató choques que dejaron al menos 88 muertos.
Los combates se producen en un momento crucial para Sudán, que se ha sumido en el caos desde un golpe de Estado el año pasado.
El golpe trastocó la transición del país hacia la democracia luego de que una revuelta popular forzó la salida del poder de Omar al-Bashir en abril de 2019.
Con información de Télam