El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue hospitalizado el miércoles en el hospital militar de Brasilia tras presentar fuertes dolores abdominales durante la madrugada de este miércoles.
Según confirmó la agencia Reuters, el mandatario brasilero fue internado para realizarse unos estudios por el fuerte dolor que sentía en la panza y para descartar cualquier enfermedad.
En tanto, en el portal Globo, se informó que Bolsonaro había sido ingresado para pruebas médicas no especificadas luego de sentir dolores abdominales durante las primeras horas del miércoles. Por tal motivo, se cancelaron las reuniones que el jefe de Estado tenía de esta mañana.
Desde el área de comunicación presidencial, indicaron el mandatario de Brasil se recupera en una habitación normal y su cuadro clínico es "estable". “Por consejo médico, el presidente estará en observación por un período de 24 a 48 horas, no necesariamente en el hospital. Está está de buen ánimo y está bien”, indicó el comunicado oficial.
Asimismo, precisaron que el presidente de Brasil se someterá a pruebas médicas y detallaron que el mandatario se quejaba por el hipo persistente desde hace unos diez días. Por su parte, CNN Brasil da cuenta de que el mandatario tiene una hernia en la región abdominal y podrían aprovechar su internación para operarla.
Ante esta situación, medios locales indicaron que Bolsonaro podría retornar a su actividad recién el próximo lunes. De esta manera, se canceló la agenda que el mandatario tenía pautada para este miércoles. Tenía prevista para las 8 una reunión del comité de coordinación de la lucha contra la pandemia y más tarde un encuentro con los titulares de los poderes judicial y legislativo.
En una entrevista radial reciente, Bolsonaro incluso habló de las molestias que lo aquejaban, según él, como consecuencia de la ingesta de un medicamento tras un implante dental. “He tenido hipo durante cinco días. Tuve una cirugía de implantes dentales el sábado. Tal vez por la medicación que estoy tomando, tengo hipo las 24 horas del día”, dijo.
El jueves pasado, además, durante una transmisión en vivo en las redes sociales, el presidente se disculpó y dijo que quizás no podía “expresarse adecuadamente”.
Desde que fue apuñalado durante la campaña presidencial en 2018, Bolsonaro ha sido sometido a seis cirugías, cuatro de ellas relacionadas con el ataque. El año pasado, en tanto, se realizó una vasectomía en enero y le extrajeron un cálculo renal en septiembre. En julio, además, se contagió de coronavirus. En las apariciones de los últimos meses, también ha tenido una tos persistente.