La ONG Human Rights Watch (HRW) denunció que al menos una docena de activistas había sido detenida en los últimos días, poco antes del primer aniversario de la muerte bajo custodia de la joven Mahsa Amini, detonante de las mayores protestas vistas en años en la república islámica, el 16 de septiembre de 2022, informó hoy la prensa internacional.
Entre las detenidas se encuentran 11 defensoras de los derechos de la mujer y un activista político, según la ONG iraní Bidarzani, sin que hasta esta noche (la tarde en la Argentina) se supiera si habían conseguido hablar con sus abogados desde su arresto el miércoles pasado.
"Las autoridades iraníes están recurriendo a su método habitual de ejercer la máxima presión sobre disidentes pacíficos en vísperas del aniversario de la muerte de Mahsa Amini", señaló Tara Sepehri Far, investigadora principal sobre Irán de HRW.
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"Las detenciones arbitrarias de una docena de activistas tienen como objetivo reprimir el descontento popular con la impunidad y las violaciones de derechos constantes", dijo.
La dirigente afirmó que "puede que las protestas callejeras hayan disminuido, pero las autoridades continúan con su represión, dirigida contra veteranos defensores de los derechos humanos y de la sociedad civil".
"Los Estados miembros de la ONU que dialogan con Irán deben situar la difícil situación de los defensores de los derechos en el centro de su compromiso", agregó.
La agencia de noticias Tasnim, vinculada a la Guardia Revolucionaria de Irán, se limitó a describir las detenciones como parte de una operación destinada a acabar con una red dedicada a "perturbar la seguridad del Estado" en la provincia de Gilan, en el norte de Irán.
Las autoridades también intentaron evitar posibles actos conmemorativos de las familias de algunos de los manifestantes muertos en 2022.
El lunes pasado, la BBC informó de que las autoridades habían presionado a las familias de los fallecidos durante las protestas para que evitaran celebrar actos en memoria de sus seres queridos.
En los últimos meses, las autoridades también detuvieron y condenaron a activistas que habían sido puestos en libertad y amnistiados hace solo unos meses.
Mahsa Amini, de 22 años, murió el 16 de septiembre de 2022 luego de que la Policía de la Moral de Irán la detuviera y golpeara por no usar de forma correcta el hijab, el velo que todas las mujeres musulmanas deben usar en público.
Con información de Télam