El Congreso de Colombia aprobó el martes una reforma fiscal que garantiza un recaudo adicional de 15,2 billones de pesos (4.010 millones de dólares), luego de que el Gobierno fracasó en lograr el aval de un proyecto más ambicioso para poner en orden las finanzas del país, golpeadas por la pandemia de coronavirus.
La reforma tributaria es clave para que el Gobierno pueda financiar las necesidades del país sudamericano este y el próximo año, en medio de un alto déficit fiscal, que para 2021 alcanzaría un 8,6% del Producto Interno Bruto (PIB) y de un 7% en 2022.
No obstante, analistas consideran que la reforma solo alivia las finanzas en el corto plazo, por lo que el próximo gobierno se vería presionado a presentar otro proyecto más estructural.
La reforma aprobada es menos ambiciosa que una que se presentó en el primer semestre por 23,4 billones de pesos y que el presidente Iván Duque tuvo que retirar del legislativo por una ola de protestas sociales y el rechazo de los congresistas, que derivó en la renuncia del entonces ministro de Hacienda.
La iniciativa aprobada es esencial para la reactivación económica de Colombia, para trazar la ruta de la recuperación del grado de inversión perdido recientemente por parte de las calificadoras Fitch y Standard & Poor’s y para buscar mantener la nota con Moody’s, dijo el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo.
"Se mantienen nuestras proyecciones: 15,2 billones de pesos de recaudo total, derivados de un esfuerzo de austeridad por 1,9 billones de pesos, un esfuerzo en la formalización y lucha contra la evasión por 2,7 billones y 10,6 billones del aporte solidario del sector empresarial", explicó el funcionario en un comunicado.
El monto de la reforma representa alrededor de 1,5% del PIB, de la nación sudamericana.
El recaudo adicional estará concentrado en una gran proporción en las empresas, que tendrán un aumento en la tarifa general del impuesto de renta a un 35%, desde un 31% que se tenía previsto para 2022, al tiempo que las entidades del sector financiero aportarán tres puntos adicionales durante el periodo comprendido entre 2022 y 2025.
En tanto, las firmas que se vieron afectadas con la pandemia del coronavirus, serán beneficiarias de un subsidio a la nómina, en busca de disminuir el desempleo.
El plan aprobado pone límites al crecimiento de los gastos por adquisición de bienes, servicios y gastos de funcionamiento como combustible, papelería y publicidad, entre otros.
Además, incorpora un cambio en las métricas de la regla fiscal, la hoja de ruta en materia financiamiento del país, que limitará el nivel de deuda pública a 71% del PIB y establece como nivel deseado el 55%, el cual se debería alcanzar en los próximos años, según los cambios aprobados a la regla fiscal.
La cuarta economía de América Latina ostentó un nivel de deuda pública de 63% del PIB al cierre del primer semestre.
La reforma fiscal puede convertirse en el logro más destacado del último año del Gobierno Duque, ante la ausencia de iniciativas económicas prometidas a comienzo de su mandato en 2018, como un proyecto pensional o uno laboral, debido al poco respaldo del que goza en el Congreso en un año preelectoral.
La votación en el Senado fue de 76 votos a favor y uno en contra, mientras que en la Cámara de Representantes fue de 124 votos a favor y ocho en contra.
Con información de Reuters