Empleados de las refinerías de TotalEnergies reactivaron la huelga que está provocando un drástico desabastecimiento de combustible en Francia, informó hoy el sindicato de izquierdas Confederación General del Trabajo (CGT), que rechaza el alza salarial pactada esta madrugada y prepara un paro general para el próximo martes.
Presionada por el gobierno, TotalEnergies acordó un aumento del 7% y una prima de entre 3.000 y 6.000 euros (2.940 a 5.875 dólares), en una negociación que la CGT denunció como una "farsa".
"Los empleados no aceptan la propuesta de la dirección. Hay que renegociar", expuso el secretario general de la CGT, Philippe Martinez, a la radio France Info, recordando que piden un incremento del 10%.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
El acuerdo se alcanzó con los sindicatos CFC-CGC y CFDT, que juntos representan al 56% de los trabajadores y que esta mañana anunciaron haberlo firmado.
La primera ministra, Élisabeth Borne, aseguró hoy que hay "signos de mejoría" en el suministro de combustible, pero la empresa Esso-ExxonMobil replicó que la producción normal se alcanzaría recién dentro de "dos o tres semanas".
A fines de septiembre, cuatro refinerías de TotalEnergies y dos de su rival Esso-ExxonMobil iniciaron un paro para reclamar un alza salarial en un contexto de inflación y de beneficios extraordinarios de los gigantes energéticos.
Las dos refinerías de Esso-ExxonMobil depusieron luego la medida de fuerza.
"Los empleados decidieron volver al trabajo y plantear un ultimátum a la dirección para la negociación anual obligatoria del 6 de diciembre", declaró a la agencia de noticias AFP Pierre-Antoine Auger, delegado sindical de FO, en la refinería de Port-Jérôme-Gravenchon.
Esta refinería sigue los pasos de la de Fos-sur-Mer, cuyos trabajadores decidieron ayer reanudar sus actividades pese al descontento con las medidas lanzadas por el Ejecutivo días atrás para obligar a trabajar a empleados de dos depósitos de combustible.
Un 28,5% de las gasolineras en Francia carecían esta mañana de al menos un combustible, según las autoridades.
La decisión del gobierno del presidente Emmanuel Macron de obligar a trabajar al personal indispensable recibió hoy el aval de la justicia francesa, que rechazó los recursos de la CGT contra medidas que los magistrados consideraron "necesarias" para preservar el orden público.
Sin esperar la decisión judicial, este sindicato de izquierdas ya promovió un frente de cuatro centrales que convocaron a un paro general el próximo martes para defender el derecho de huelga y abogar por un alza de salarios.
Los efectos de la invasión rusa de Ucrania y la respuesta de Moscú a las sanciones europeas se hacen sentir entre los franceses.
Además de un aumento de los precios de la energía y la alimentación, el gobierno los urge a ahorrar energía para enfrentar el inminente invierno boreal.
De hecho, el 6 de este mes, el gobierno anunció una significativa reducción del consumo de energía para el invierno y hasta un 40% para 2050.
La coyuntura económica también impulsó en paralelo las ganancias de los grupos energéticos como TotalEnergies, que en el primer semestre de 2022 obtuvo unos beneficios extraordinarios de más de 10.000 millones de dólares.
Con información de Télam