El defensor del Pueblo de Colombia, Carlos Camargo, pidió a las disidencias de las FARC que hagan definitivo el cese al fuego unilateral que anunciaron por Navidad y hasta el siete de enero. Camargo lo pidió como un "gesto de buena voluntad" y destacó la decisión del grupo armado. "Celebramos que se estén haciendo eco de la invitación que hemos venido recomendando desde hace varias semanas para que se muestren gestos de paz que permitan la consolidación de un proceso de diálogo", dijo el defensor del Pueblo.
El cese al fuego, por ahora provisorio, que optaron por tomar las disidencias de las FARC llegó a menos de un mes de que se formalizaran los diálogos entre el Gobierno y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y desde la administración de Gustavo Petro esperan que el inicio de los diálogos con la guerrilla activa más grande que tiene Colombia termine por motivar a las demás. Entre los grupos que días previos a la fiesta anunciaron una tregua no solo están las disidencias sino también organizaciones que operan en Sierra Nevada, sobre la costa Caribe, y Buenaventura, a orillas de la Bahía de Buenaventura en el océano Pacífico.
Sobre estos anuncios, Camargo dijo que estarán "vigilantes" con el alto el fuego anunciado por el bloque Magdalena Medio (otra de las unidades subdivisionales de la guerrilla de las FARC) "para que cumplan la tregua anunciada" en las regiones de Norte de Santander, sur de Bolívar y noreste de Antioquia.
"Pedimos a las disidencias de las FARC que ojalá cesen de manera definitiva todas las acciones que vienen afectando a las comunidades de estas zonas del país y de otras donde hacen presencia", reclamó la Defensoría. Las autoridades pidieron al resto de grupos armados que "muestren su voluntad" y de manera permanente se sumen al alto el fuego "con el fin de empezar lo antes posibles los diálogos" que permitan poner fin a la violencia.
Negociaciones entre el Gobierno y el ELN
Este lunes el gobierno y el ELN anunciaron que retomarán los diálogos de paz recién a fines de enero, no a principios como habían dicho inicialmente. Las negociaciones tendrán lugar en México y se postergó porque las partes esperan que tanto Alemania como España, Suecia y Suiza se sumen como facilitadores al proceso. Mientras tanto, Chile y México continúan como países garantes y Cuba, Noruega y Venezuela, como países acompañantes.
El 12 de este diciembre, las delegaciones concluyeron la primera ronda de acercamiento con cuatro acuerdos parciales. Uno de ellos es un pacto humanitario que entrará en vigencia en enero y permitirá el regreso de cientos de familias desplazadas a las regiones de Bajo Calima, Chocó, Medio San Juan y Valle del Cauca.
El gobierno de Colombia y el ELN habían iniciado conversaciones de paz en 2016, durante la gestión de Juan Manuel Santos, quien acababa de firmar un acuerdo similar con las FARC, pero esas negociaciones fueron congeladas en 2018 por el sucesor de Santos, Iván Duque, después de que el ELN atentara contra una escuela de policía y dejara 22 muertos. La reanudación del diálogo fue una de las prioridades del actual presidente Petro desde su campaña electoral y luego, a partir de su asunción, en agosto pasado.
Con información de Télam